Existen varios tipos de alimentos que se desaconseja consumir porque dañan la memoria y la concentración, además de que pueden producir enfermedades graves. Los alimentos que comprometen la capacidad cognitiva no son buenos para el cuerpo, así como hay ciertas bacterias intestinales que pueden desencadenar procesos metabólicos e inflamación cerebral que afectan a la memoria. También existen los alimentos que comprometen la flora intestinal y afectan a la salud.
Sí quieres conocer de primera mano los alimentos que debes evitar para la perdida de memoria o la concentración, aquí te traigo una lista de la comida que es poco recomendable o que es mejor dejar de consumir para mantener una vida sana.
Los alimentos que debes evitar

Hay gran variedad de alimentos que limitan la memoria y el pensamiento, la igual que existen algunos que es aconsejable evitar o limitar puesto que combaten la inflamación y promueven la salud cerebral, el pensamiento agudo y la adecuada toma de decisiones.
La dieta es muy importante en la vida de las personas ya que dependiendo de los alimentos que se consuman pueden afectar de forma positiva o negativa al cuerpo. Por eso es significativo conocer la clase de alimentos que dañan la memoria o son malos para el desarrollo del cuerpo.
Azucares añadidos

El azúcar añadido puede conducir a un exceso de glucosa en el cerebro, lo que se relaciona con problemas de memoria y menos plasticidad del hipocampo. Es desaconsejable el consumo de procesados poco saludables como pueden ser la bollería industrial y los refrescos. Además, el consumo a largo plazo del azúcar puede causar problemas neurológicos y afectar a la memoria, reduciendo así la capacidad de aprendizaje del cerebro.
Según un estudio de la revista Journal of the American Medical Association, las personas que consumen entre el 17 % y el21% de calorías en azúcar presentan un alto riesgo de morir por enfermedad cardiovascular en comparación con los que consumen alrededor del 8% de azúcar en sus calorías diarias.
Comida frita

En una investigación donde participaron 18.080 personas, aquellos que llevaban una dieta rica en alimentos fritos tenían unas puntuaciones más bajas en el aprendizaje y la memoria. Además, aquellos que consumen más alimentos fritos tenían también más probabilidades de desarrollar depresión.
La comida frita provoca inflamación que puede dañar los vasos sanguíneos y también puede conllevar un aumento en el colesterol, enfermedades cardiovasculares o sobrepeso y obesidad. Por ejemplo, el aceite vegetal cuando se cocina se convierte en grasas saturadas, que ayudan al colesterol a ubicarse en las arterias. Y cuando están fritos los alimentos destruyen las células nerviosas del cerebro, deteriorando la capacidad para aprender y la capacidad de formar nuevos recuerdos.
La fructosa

La fructosa es un sustituto del azúcar, que puede obstaculizar el funcionamiento de las células del cerebro y en cómo se almacena la energía para procesar el aprendizaje y los pensamientos. Este alimento reduce la capacidad de aprender y la capacidad de recordar información, por lo que afecta a la memoria.
En algunos zumos de frutas o en la miel se puede encontrar la fructosa, aunque también está presente en algunas frutas y verduras que sí son recomendables consumir porque los demás nutrientes que tienen estos alimentos contrarrestan a los malos.
Alimentos procesados

Los alimentos procesados químicamente están llenos de altos niveles de azúcar, fructosa, sodio y aceites. Además, se ha demostrado que este tipo de alimentos, como mantequilla, embutido o galletas, pueden dañar la salud del cerebro.
La comida procesada o precocinada afecta también al sistema nervioso central y aumenta el riesgo de desarrollar un trastorno neurodegenerativo como puede ser el Alzheimer. Sin embargo, no hay que eliminarla del todo de la dieta diaria ya que no es malo comerlos de vez en cuando, pero si que hay que evitar comerlos a menudo y en cantidades excesivas.
La comida rápida

Fast food o comida rápida es conocida por provocar cambios en la química del cerebro, haciendo que síntomas similares a la abstinencia aparezcan, y que pueden provocar depresión o ansiedad. Este tipo de comida como las hamburguesas o las pizzas también afectan a la producción de dopamina, la hormona que participa en la función cognitiva, que afecta a la capacidad de aprendizaje, la motivación y la memoria.
Además, abusar de la comida rápida puede causar obesidad o problemas del corazón, así como dañar el cerebro de forma permanente.
El exceso de sal

Tomar en exceso los alimentos con sal puede afectar al cerebro humano, puesto que también los alimentos salados tienen un efecto negativo en la salud cardiaca y en la presión arterial. El exceso de sal puede perjudicar a la capacidad de pensar de una persona, así las dietas altas en sodio están asociadas a una mala salud vascular que puede conducir a que la disminución cognitiva sea más rápida.
Las grasas trans

Este tipo de grasa está presente en las patatas fritas, por ejemplo, y una alta ingesta está vinculada a la contracción del cerebro. Las dietas que son altas en grasas trans aumentan el beta-amiloide en el cerebro, que está asociado al Alzheimer. Además, estas grasas son también perjudiciales para el corazón y el sobrepeso, ralentizan los reflejos en la capacidad de respuesta cerebral y aumentan el riesgo de sufrir un derrame.
Glutamato monosódico

El GMS o glutamato monosódico es un aditivo que se emplea en la industria alimentaria, sobre todo en la comida asiática, y que es usado para potenciar el sabor de los alimetnos. Sus componentes, sin embargo, afectan de forma negativa al cerebro mediante sobreexcitación de las neuronas hasta el punto de que pueden provocar un daño cerebral. También puede provocar dolores de cabeza, fatiga o desorientación.
Alimentos con nitratos

Un estudio sugiere que los nitratos pueden alterar las bacterias intestinales que inclinan la balanza hacia un comportamiento maniaco. Así que se aconseja consumirlos con moderación y buscar alimentos que no los incorporen.