Hollywood tiene su lista negra de actores y actrices, bien por el movimiento #MeToo y los escándalos sexuales o bien por la personalidad, rebeldía y el calvario que supone tratar y trabajar con ellos. En esta lista están estrellas como Katherine Heigl y Shia LaBeouf, pero también otros que vamos a repasar ahora.
El divismo en Hollywood es cada vez una seña de identidad que antes era casi obligada y que ahora se ve mal. Tanto, que la industria les acaba despidiendo, apartando o ninguneando. Nadie quiere contratarles ni trabajar con ellos.
Katherine Heigl, desterrada pero viendo la luz

Y decimos esto porque tras tres años de ostracismo volvió este año con la serie ‘Firefly Lane’, apostando Netflix por ella, pero continúa en la ‘lista negra’ de Hollywood. La que fuera favorita de las comedias románticas saltó a la fama con el papel de la doctora Izzie Stevens en la serie ‘Anatomía de Grey’.
Era inevitable que diera el salto a la gran pantalla y una de las actrices más solicitadas. Todos la daban como la sustituta de Meg Ryan, Jennifer Aniston o de Julia Roberts e iba camino de ser la ‘nueva novia de América’. Empezó a protagonizar las comedias románticas más destacadas, como hicieron sus predecesoras.
Pero Katherine Heigl, cuando con 26 años estaba en la cima, comenzó a declarar contra la industria, los rodajes y el machismo de argumentos y de compañeros. Tanta honestidad molestó y fue relegada al olvido. Fue una de las primeras víctimas de la corriente misógina llamada ‘cultura de cancelación.
Shia LaBeouf, ¿rebelde con causa en Hollywood?

Hablamos de uno de los actores más conflictivos y casi intratables en rodajes. Contó David Ayer, director de ‘Fury’, como les dijo a los protagonistas Brad Pitt y Shia LaBeouf que se pelearan para crear lazos afectivos y ambos se lo tomaron muy en serio, acabando a puñetazo limpio.
De lo que nadie duda es que se mete en la piel de sus personajes, emborrachándose continuamente para interpretar su papel en ‘Lawless’. Sin embargo, ni siquiera su talento ha impedido que este en la ‘lista negra’ de Hollywood y pocos quieran trabajar con él. Incluso en trabajos «menores» como el rodaje de un videoclip deja huella. La cantante Sia dijo de había que «mantenerse alejado de él».
Charlie Sheen

Siempre, como su padre Martin Sheen, has sido un gran dolor de muelas para Hollywood. Su talento nunca ha salido en todo su esplendor gracias a su mal genio, a sus problemas con el alcohol y las drogas y el ser un verso libre que hace y dice lo que le da la gana. Por ello, tras unos comienzos prometedores, acabó relegado, hasta que se convirtió en el actor mejor pagado de la televisión con ‘Dos hombres y medio’.
Sin embargo, era de esperar que la cosa acabara mal, abandonado la serie cuando cobraba casi 2 millones de dólares por episodio. Tuvo que ir a rehabilitación pero no dejó de criticar al creador de la serie, Chuck Lorre.
January Jones, conflictiva y prepotente

Eso es al menos como la definen quienes han trabajado con ella, con lo que Hollywood ha optado por apartarla. Llegó a estar nominada a los Globos de Oro y a un Emmy. La recordamos sobre todo por su papel de Betty Draper en la gran serie ‘Mad Men’.
Januray Jones tenía talento y belleza para triunfar, pero tiene fama de muy mal genio y de no ser precisamente amable con los compañeros de rodaje ni con el equipo, ni siquiera con los directores. Lo que se llama ser una persona con la que es difícil trabajar.
Lindsay Lohan

Fue una de tantas niñas prodigio, ya que cuando sólo era una niña la recordamos en trabajos como ‘Juego de Gemelas’. Se fue disparando su popularidad en el cine y la música, pero la caída fue igual de fuerte.
Como el caso de Charlie Sheen, el consumo de alcohol y drogas le empezó a crear problemas no sólo en su profesión, sino en su vida personal, con arrestos y clínicas de rehabilitación. Le echaron de varios sets y despedida de numerosos proyectos. Actualmente apenas puede participar con algunos roles menores.
Mike Myers, divertido en pantalla, odiado en Hollywood

Muchas veces nada tiene que ver lo que ves en pantalla con la realidad fuera. Es lo que pasa sobre todo con los que te hacen reír en la ficción pero luego en la vida real son todo lo contrario. Es el caso de grandes cómicos como Mike Myers, reconocido mundialmente por ‘Austin Powers’.
Cuando la cámara se apaga, Myers se convierte en Mr. Hyde, un divo lleno de excentricidades, mala educación y exigencias increíbles. La actriz que le acompañaba en ‘Wayne´s World’, Penelope Spheeris, acabó harta y desesperada.
Amanda Bynes, otra promesa de Hollywood olvidada

Fue durante un tiempo otra de las grandes promesas de Hollywood y su progresión era buena, protagonizando películas como ‘Easy A’, ‘Hairspray’ y ‘She’s the Man’, y al mismo tiempo, también era una de las principales en la serie ‘What I Like About You’.
Pero, como en tantos casos, la fama te lleva por caminos erróneos, como la droga. Fue el caso de Amanda Bynes, sumado a varios arrestos. Terminó siendo despedida de la película ‘Hall Pass’ y desde entonces ha desaparecido del panorama.
Mandy Patinkin

No es una estrella ni nunca lo será, y no será por talento, aunque ya es un actor veterano. Pero hay personalidades poco compatibles no ya con Hollywood, sino con la vida normal digamos y con el buen trato social
Patinkin al menos reconoce que es difícil trabajar con él. Quizá por eso en 2007, sin previo aviso, abandonó la serie que le hizo famoso, ‘Mentes criminales’, sin dar motivo alguno. Él mismo reconoció años después que no soporta que los directores le den indicaciones y ni siquiera acepta opiniones.