Jorge Sanz lleva consigo una gran intrahistoria con sus hijos Marta y Merlín. El actor ha vuelto a resurgir en el programa de El Desafío y en Ven a cenar conmigo. Es unos de los mayores protagonistas del concurso y el que más ha impresionado… Hay muchas generaciones que no le conocían y, otras, que le conocieron en su niñez y cuando era el galán de todas las películas españolas e internacionales.
El niño que conquistó con el drama de la película Valentina siguió con el drama fuera de las cámaras. Su historia ha sido una vida muy vivida -valga la redundancia- a sus 51 años. Habla de ello a corazón abierto, pero sin sentirse víctima. Su intrahistoria no tiene desperdicio. La dura muerte de su exmujer, un infarto de corazón con 44 años, dos stent, la ruina económica entre otras cosas por visibilizar la enfermedad de su hijo Merlín. Padre de cuatro hijos, tres biológicos (Marta, Merlín y Lope), uno apadrinado (Guoxu), dos de ellos tienen unas trágicas e impactantes historias que te vamos a desvelar.
Merlín, el hijo de Jorge Sanz que con 18 años padece fibrosis quística… Un año de vida
> Jorge Sanz se ha congraciado amigos y enemigos a partes iguales en las redes sociales tras su paso por el concurso de El Desafío. Aunque tiene muchos detractores, sin embargo, es ‘adorado’ por sus amigos, por los que le conocen de verdad. De hecho, dentro del programa, ha hecho gran piña con todos y en especial con Pablo Puyol y como no, con David Bustamante.
Pero nadie sabe lo que ha vivido el artista dentro de casa. A su lado está la que es su pareja con la que no está casado, Aurelie Domingues pero con la que lo ha intentado en dos ocasiones infructuosas. Fruto de esta relación nació Lope, que tiene seis años de edad.
El pequeño es el niño bonito de todos, y es que Jorge Sanz a pesar de sus dificultades, ha sido un padre gallina. Ha reunido a todos. Incluso a su cuarto hijo, Guoxu. Guoxu es su hijo adoptivo de 19 años que vive en el seno familiar.
Pero no ha sido todo un camino de rosas. Merlín y Marta, llevan a sus espaldas mucho pasado. la historia de Merlín es algo más conocida y es todo un luchador, pero la de Marta es deslumbrante. Todos unidos, han conseguido ir sorteando todos los obstáculos y pruebas que les ha puesto la vida.
Nada más nacer Merlín le diagnosticaban una fibrosis quística y le daban tan solo un año de vida. Desde entonces, la lucha por la vida ha sido una constante en sus vidas. A día de hoy, como te contábamos tiene 18 años y han pasado momentos muy duros. La enfermedad de Merlín ‘les llevó a la ruina’.
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Jorge Sanz ‘utilizó’ a su hijo para ayudar a la fibrosis quística mientras Paloma se apagaba
> El actor que aparecía en Conan ‘El bárbaro’ con 11 años dando vida al legendario héroe siendo un niño y que protagonizaba Arnold Schwarzenegger, era un valor cinematográfico en alza. Con la chulería que le caracteriza, interpretaría a José Garcés, un niño que, a toda costa quería enamorar a Valentina (Paloma Gómez). Mítica es la escena en la que, para impresionar a la protagonista, sería capaz de que le pegaran un tiro con una escopeta de perdigonazos en el dedo. No derramaba ni una lágrima. Sin embargo, sí que las ha derramado en la vida real.
Y es que la vida quiso que los niños prodigios del cine español se encontraran años más tarde y que fruto de su amor naciera Merlín. Desde entonces la pareja solo luchaba por el pequeño. En 2006 llegaría el divorcio de la pareja. Pero, aunque estaban divorciados, igual que recogió a Paloma -actriz y bailarina- tras un atropello que le llevó a retirarse por el daño sufrido en las piernas, de la misma manera le recogió cuando tuvo un cáncer de páncreas. Y se la llevó a Torrelodones cerca de ellos, a una casa que él pagaba.
Los últimos años han sido muy duros para el reputado actor, al ver como Paloma se apagaba. Además, se enfrentaba a una dura batalla junto a su hijo para visibilizar la fibrosis quística y luchar porque la sanidad pública costeara un medicamento para todos las personas que la sufren que les hace vivir 20 años más, tras cuatro años negándose a ello. Su hijo le decía que le utilizara para hablar de ello.
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Jorge Sanz tiene una hija, Marta, a la que perdió y que luego reencontró
> Marta Sanz es su hija primogénita y una de las más desconocidas. Su historia es impactante. A sus 30 años tiene una relación de lo más especial con Jorge Sanz. Hasta hace bien poco, todos vivían juntos, ahora ya es independiente. Para el actor es la hija que más se le parece incluso en el humor. Por primera vez hablaba de ella con ¡Hola! desvelando que la niña nació por una aventura que tuvo mientras rodaba Los Jinetes del alba, con la camarera del bar donde se hospedaban.
Un año después la chica aparecía a verle y decirle que estaba embarazada de siete meses. Jorge Sanz reconoce que no supo actuar y afrontar en ese momento, la situación. La chica desapareció por completo. Aun así, no lo dejó y estuvo en contacto con ella y le dijo de arreglarlo haciéndose las pruebas de paternidad. Él no supo más de ella hasta que se enteró que se había casado con un chico, asumiendo la responsabilidad como padre, a condición de borrar para siempre de su vida el nombre de Jorge Sanz. ¡Madre mía que interesante está este capítulo de la vida de Jorge Sanz, sigue leyendo que te va a encantar… ¡Ojalá otras personas actuaran igual!
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Jorge Sanz: «Es mi hija (Marta). Y cuando cumpla 18 años apareceré»
> Él no quiso perder a esa hija. Jorge Sanz incluso habló con el hombre que se hizo cargo de su hija, algo que él entendió. El ganador del Oscar por Belle Epoque, le dijo: «Tú has reaccionado. Es el amor de tu vida y has criado una niña que es lo más maravilloso que hay en el mundo, pero es mi hija. Y cuando cumpla 18 años apareceré», digno de una telenovela turca de las de ahora. Y es que, como siempre decimos, la realidad supera la ficción.
Pero las palabras del amigo de Quique San Francisco, no quedaron ahí: «Y, hasta entonces, cualquier cosa que necesitéis, ahí estaré yo«.
Gracias a la abuela materna, Jorge Sanz pudo ver como la pequeña Marta crecía. Cumplidos los 18 años, ese misma día le llamó. Y justo una semana después de celebrar su mayoría de edad, se plantó en Oviedo para verla. Llevaba meses ensayando y escribiendo en una libreta, todo lo que le diría. No sabía como iba a afrontar ese momento tan importante en su vida. A los tres meses de aquello, ya estaba viviendo con él. Desde entonces, no se han vuelto a separar y se ha convertido en su apoyo y en su confesora… ¿Se puede pedir más?
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