El próximo 23 de julio se cumplirán dieciséis años desde que Carmina Ordóñez falleciese de forma inesperada. No había ni cumplido los cincuenta años cuando nos dijo adiós, dejando huella en los corazones de todos los españoles. A día de hoy siguen siendo muchos los interrogantes sin respuesta sobre su fallecimiento, y es por eso que Cotilleo.es quiere daros la respuesta a algunos de ellos.
Carmina Ordóñez, la reina de corazones
> Casi dos décadas después de aquel fatídico 23 de julio del año 2004, Carmina sigue siendo todo un icono social en nuestro país. Nadie la olvida y todos coinciden en hablar maravillas sobre ella. Su evidente belleza mediterranea y su arrolladora personalidad ocuparon gran parte de los contenidos televisivos y también de las portadas de las revistas del corazón. Sus hijos Fran, Cayetano y Julián Contreras no la olvidan, y ambos coinciden en que no hay día en el que no se acuerden de ella.
Carmina Ordóñez falleció el 23 de julio del año 2004. La trágica noticia de su fallecimiento conmocionó a buena parte de la opinión pública y, dieciséis años después, varios misterios sobre su muerte todavía no se han resuelto. Algunos culpan a las drogas, otros aseguran que fue su cuerpo quien le falló tras sufrir un infarto de miocardio. Cotilleo.es ahonda en todos estos detalles y esclarece, por fin, qué le pasó a la divina.
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Su empleada la encontró en el baño
> El cuerpo sin vida de Carmina flotaba en la bañera de su apartamento. Eva Carreño, la que fuera su representante; y Luisa, su asistenta, fueron las que se encontraron con tan terrible estampa y dieron la voz de alarma a los servicios de emergencia, que solo pudieron confirmar la muerte de la divina. Fue su empleada del hogar la que, tiempo después, aireó algunos detalles escabrosos sobre las últimas horas de Ordóñez. » En el baño quedaron restos de polvo blanco y un rulillo», reveló a La Razón, dejando así caer que las drogas estaban detrás del fallecimiento.
Lo cierto es que los últimos años de Carmina no fueron nada fáciles y no era ningún secreto que se había sumergido en una espiral de autodestrucción que no la llevaría por buen camino. Ella misma vaticinó, en clave de humor, que no llegaría viva a los cincuenta. Por desgracia, su profecía se cumplió y Ordóñez perdió la vida un solo año antes de alcanzar el medio siglo de existencia, dejando huérfanos a sus tres hijos: Fran, Cayetano y Julián.
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El distanciamiento de sus tres hijos
> La vida de la divina cambió para siempre el 3 de enero de 1974, cuando se convirtió en madre primeriza tras el nacimiento de Francisco Rivera, quien tomó el nombre de su padre, el célebre Paquirri. Tres años y diez días después, la feliz familia creció con la llegada de Cayetano, pero Carmina y el torero no fueron capaces de resolver sus diferencias y terminaron separándose en 1979. Recién empezada la década de los divertidos 80, Ordóñez empezó una relación con Julián Contreras, con quien alumbró a su tercer y último hijo. Ordóñez pudo disfrutar de todos ellos mientras eran pequeños, pero la cosa cambió cuando crecieron y los hermanos tomaron caminos diferentes.
Carmina nunca pudo imaginar que, tras su muerte, sus tres hijos se distanciarían en función de su primer apellido, dejando de lado el vínculo que los unirá para siempre: su madre. No ocurrió así con el cuarto en discordia, Kiko Rivera, hermano por parte de padre de Cayetano y Fran. Por lo visto, Ordóñez y Pantoja mantuvieron una conversación tras la muerte de Paquirri en la que acordaron que los vástagos del torero debían permanecer siempre unidos, por encima de todas las cosas.
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Carmina e Isabel Pantoja: su conversación secreta
> La estereotipada rivalidad entre dos mujeres que han pasado por la vida de un mismo hombre no tiene cabida en esta historia. Ordóñez y Pantoja jamás fueron amigas, pero tuvieron la capacidad de aunar fuerzas tras la muerte de Paquirri por el bien de los tres hijos del torero. «Solo recuerdo las cosas buenas y le estoy muy agradecida a Isabel por lo bien que se ha portado estos años con mis hijos», señaló Carmina, tal y como reveló Pilar Eyre en su columna de Lecturas.
De hecho, poco después de la muerte de Paquirri, Carmina se plantó en Cantora para hablar con Pantoja. «No quise ir al funeral porque no era mi lugar, pero ayer estuve en su casa (de Isabel) y sobre la cabecita de los tres niños nos comprometimos a que seguiríamos unidas por su bien», reveló Ordóñez a su amiga Pilar Eyre. Ambas lograron su objetivo y, a pesar de las polémicas familiares por la herencia del torero, sus tres hijos se han mantenido más o menos unidos y mantienen una buena relación. en cierto modo, la divina puede descansar en paz.