Pocos platos son tan típicos españoles como la paella. Por mucho que sea especialmente típica en el levante, su práctica se ha extendido prácticamente a todas las regiones, ya que lo bueno es que hay para todos los gustos, desde los arroces con carne, verduras o pescado, pasando por la textura caldosa, melosa o seca. Esta receta con pollo que vamos a preparar a continuación es una de las más tradicionales, un básico dentro de los arroces, y cuyo único secreto está en la elaboración de un buen sofrito y en utilizar caldo de pollo casero. Lo demás viene casi solo, aunque sí es cierto que la práctica es fundamental para que seamos unos perfectos arroceros y lo sirvamos a la mesa en su punto.
El «truquillo» de una buena paella

Hacer una buena paella es algo muy sencillo para quienes están ya experimentados en la labor, pero si se hace por vez primera no hay que desanimarse si no sale del todo perfecta, ya que es imprescindible prepararla varias veces paella para cogerle el «truquillo» y que quede en su punto el arroz, que a la postre es lo más difícil. Además, con la práctica, cada cual consigue dejarlo más a su gusto, desde los resultados melosos o incluso caldosos, a los más secos y con el famoso «socarrat» incluido en la base, ese arroz que se queda pegadito al fondo y que suele encantar a la mayoría de los que lo prueban. Fundamental también es hacerla en una paellera de hierro, a ser muy gruesa porque reparte mejor el calor.
Ingredientes de la paella de pollo

Hacer una buena paella de pollo no tiene por qué llevarnos más de 40 minutos. Para llevarla a cabo precisaremos como ingredientes, si la queremos hacer, por ejemplo, para seis personas, 1 kg de pollo sin piel, cortado en trozos (si te lo cortan en la carnicería con la máquina, mucho mejor que con cuchillo o sierra, ya que por este sistema suelen quedar huesecillos incómodos dispersos en el arroz), arroz tipo bomba, 80 gramos por persona (un vasito de vino aproximadamente), 200 gramos de judías verdes, caldo de pollo casero (el doble de cantidad que de arroz, así que prácticamente 1 litro (si no se dispone siempre puedes utilizar una pastilla de caldo concentrado o incluso simplemente agua), y un poco de azafrán o colorante.
Para el sofrito

Para hacer nuestra paella de pollo lo primero es preparar el sofrito. Para el mismo necesitaremos un pimiento rojo, un pimiento verde, una zanahoria grande o 2 pequeñas, una cebolla, dos dientes de ajo, 3 cucharadas soperas de salsa de tomate o tomate triturado, una cucharada sopera de carne de pimiento choricero, una hoja de laurel, una rama de tomillo, una rama de romero, aceite de oliva virgen extra y sal. Se lavan los pimientos y se les quita el pedúnculo, se pelan la cebolla y los ajos, y se lavan las zanahorias, y se pica todo muy finito.
Cómo preparar la paella

Una vez tengamos el sofrito, para seguir con la paella de pollo hay que poner la paellera a fuego medio con aceite de oliva, suficiente para que el fondo quede cubierto, y, cuando esté caliente, incorporar las verduras y un poco de sal, además de las aromáticas (laurel, tomillo y romero). Se deja que se cocine todo junto unos 15 o 20 minutos, hasta que empiecen a dorarse ligeramente, y se remueve de vez en cuando.
Dorar el pollo

En nuestra receta de paella con pollo se incorpora ahora el tomate y la carne de pimiento choricero y se revuelve todo junto y se deja que se cocine otros tres minutos más. Una vez hecho ese paso se retira de la paellera con una espumadera el sofrito para dejar ahí el aceite y aprovecharlo para los siguientes pasos. Recuerda que este sofrito sirve para 2 arroces, así que retira la mitad a un recipiente con tapadera, y cuando se enfríe ya se puede tapar y congelarlo para otra ocasión (así ahorrarás muchísimo tiempo al preparar tu siguiente paella). Ahora en la propia paellera añadiendo un poco de aceite dora los trozos de pollo por todos sus lados, que quede perfectamente sellado, y échale sal al gusto. Reserva.
Cómo finalizarla

Para finalizar nuestra paella de pollo hacemos lo mismo que con éste con las judías verdes (que se habrán lavado y cortado desechando los extremos), salteándolas para que se doren por ambos lados con un poquito de sal, y aceite si es necesario. Incorpora el pollo y el sofrito, y añade el arroz. Se revuelve todo bien durante 5 minutos antes de añadir el caldo, que se calienta en un cazo aparte para que esté casi hirviendo al utilizarlo. Se sube la temperatura de la paellera para que esté alta y vierte en ella el caldo, también el azafrán o colorante alimentario, y se remueve ligeramente la paellera para que quede todo bien repartido. Cuando empiece a hervir, baja el fuego al mínimo y deja que se cocine unos 18-20 minutos. Y ya no se remueve, si acaso un poco la paellera al principio cogiéndola de las asas.