Se avecinan días muy oscuros para la tonadillera. Las consecuencias del enfrentamiento mediático que su hijo mantiene contra ella van más allá del deterioro de su reputación pública, y la cantante ha de hacer frente ahora a serios problemas legales que podrían acabar con su hegemonía sobre Cantora. Kiko Rivera ya ha señalado que está dispuesto a vender su parte de la finca familiar, y los planes que un empresario interesado tiene para el terreno pasan por el desalojo de Isabel Pantoja, su hermano Agustín Pantoja y su madre doña Ana. De cumplirse los peores presagios, la intérprete de Marinero de luces deberá empezar a buscar pisito si no quiere verse de patitas en la calle… ¿Quieres saber qué ha pasado y enterarte de todos los detalles? Sigue leyendo, te lo contamos a continuación.
Kiko Rivera, dispuesto a hundir a Isabel Pantoja
> Ya han pasado varios meses desde que el DJ diera comienzo a su particular guerra contra su madre. En su primera intervención en Cantora, la herencia envenenada, el hijo pequeño de Paquirri confesó que la cantante había incumplido las últimas voluntades del torero y que se había quedado con parte de la herencia que legítimamente pertenecía a los descendientes del maestro. En medio de este terrible enfrentamiento se encuentra la finca familiar, que pertenece a Isabel Pantoja en un 52,40 % y a Kiko Rivera en un 47,60 %. El joven acusa a la folclórica de haber utilizado los poderes que tenía sobre los terrenos para utilizarlos como abal en la solicitud de varios préstamos millonarios, una conducta que tacha de inmoral. “Por su culpa llevo hipotecado desde los dos años”, se lamentaba el sevillano en el programa presentado por Jorge Javier Vázquez.
Ahora, Kiko Rivera está dispuesto a orquestar su venganza contra su madre y a volver a tomar las riendas de la finca familiar. Así, el Dj ha anunciado sus intenciones de vender su parte de los terrenos, y legalmente no hay nada que se lo impida. “Me he informado con mis abogados, uno de los compradores que llevé a comprar Cantora, pues posiblemente esté interesado en comprar mi parte… Si todo sale como debe igual tiene un inquilino tomando café con ella. Me está llamando un montón de gente para comprar y vendería, por supuesto, y con lacito, a un precio normal. Ya depende del precio que le ponga uno. No le voy a poner el precio que tiene sino más bajo… No quiero movidas. Mi parte de Cantora está en venta. Y se puede hacer. Yo pensaba que no se podía hacer, por eso no lo hice”, explicó Kiko Rivera en Domingo Deluxe.
Pero, ¿en qué situación dejaría esta hipotética venta a Isabel Pantoja? ¿Podría seguir viviendo en Cantora sin problema alguna? Lo cierto es que, si su hijo consigue hacer un trato con algún interesado, a la tonadillera se le pondrán por delante varios problemas que tendrá que resolver si no quiere verse ‘compartiendo piso’ con un desconocido a sus 64 años. ¿Quieres conocer todos los detalles y enterarte de cómo se presenta el futuro de la cantante? Sigue leyendo, te contamos en profundidad en la página siguiente.
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Isabel Pantoja, con un pie fuera de Cantora
> Tal y como ha indicado Pepe del Real en El programa de Ana Rosa, ya hay interesando un empresario murciano en la compra de la finca, y sus planes pasan por convertir los terrenos en un campo solar. Según el colaborador, el presunto comprador permitiría a Isabel Pantoja hacer uso y disfrute de la zona habitable de Cantora durante un tiempo prudencial, pero perdería su dominio sobre las zonas no construidas, donde se levantarías las placas fotovoltaicas. Se trata de un panorama desolador para la tonadillera, quien vería el que ha sido su hogar durante tantos años reducido a una planta de energía renovable. Sin embargo, aunque se trata de un escenario posible, lo cierto es que a Kiko Rivera no le será nada fácil vender a un tercero su parte de la propiedad, e incluso podría salir perdiendo de esta operación.
Para empezar, Kiko Rivera anunció que pondría en venta su parte de Cantora a un precio muy reducido para encontrar pronto un comprador, pero lo cierto es que las leyes actuales le obligan a ofrecer primero la compra de su porción a su madre, en las mismas condiciones que a cualquier otro interesado. Isabel Pantoja, como copropietaria, tiene derecho a la adquisición preferente, así que podría hacerse con el porcentaje de su hijo a un coste por debajo del valor de mercado. El resultado final sería que la tonadillera obtendría el 100 % de la propiedad por el módico precio que el DJ ya ha anunciado, lo que dejaría a la cantante en una posición que se acercaría bastante a la victoria.
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El futuro más incierto de Isabel Pantoja
> Si, finalmente, Isabel Pantoja se negara a comprar la parte de Cantora de su hijo, entonces Kiko Rivera tendría libertad para negociar con terceros. El supuesto nuevo copropietario de la finca podría llegar a un acuerdo con la tonadillera para determinar el futuro del inmueble, y es llegados a este punto donde se contemplan varias posibilidades: la tonadillera no podría negarse a que el otro dueño de los terrenos hiciera uso y disfrute de los mismos, incluida la parte construida, y si lo hiciera debería indemnizarle con una cuantiosa suma de dinero. ¿Se imaginan a la folclórica compartiendo casa con un auténtico desconocido?
Con todos estos datos sobre la mesa, se vislumbra cada vez más la posibilidad de que Isabel Pantoja acabe abandonado Cantora de forma voluntaria o forzada. Supuestamente, sus cuentas no atraviesan ahora por un buen momento, así que parece improbable que pueda comprar la parte de la finca de Kiko Rivera. Tampoco será agradable para ella que su hijo venda su porcentaje a un tercero, que podría caminar como Pedro por su casa por los terrenos. Así las cosas, la tonadillera no tendría más remedio que liquidar su porción del inmueble para buscar otro sitio en el que vivir tranquila. En todos los supuestos, el resultado parece el mismo: Isabel Pantoja, de patitas en la calle, desterrada de Cantora.