Se puede asegurar que hay muchísimas formas de preparar alitas de pollo, y seguramente todas van a estar igual de ricas (un ejemplo de ello son las picantes con salsa de miel y sriracha), pero en las siguientes líneas vamos a ver cuál es la receta de todo un afamado chef español como es Dani García, adaptada a la técnica sous vide. Fue la que publicó en su canal de YouTube durante los meses de confinamiento y que con el paso del tiempo se ha convertido en una de las favoritas de gran cantidad de personas a las que les fascina este plato en concreto. Con la misma se podrá comprobar cómo se obtienen alitas crujientes, con un sabor muy especiado. Además, el crujiente se consigue sin necesidad de freírlas, por lo que es una receta más saludable que las alternativas habituales.
Propiedades de las alitas de pollo

Y es que, aunque no lo parezca, comer alitas de pollo, sin abusar eso sí, puede ser algo bueno para nuestro organismo. Para todos aquellos que lo desconozcan, se trata de una carne que se digiere fácilmente, por lo que es excelentes para personas con molestias intestinales. Por otro lado, poseen Vitamina B6 que fortalece el sistema inmunológico, así como selenio, mineral que ayuda a la buena absorción de las vitaminas y es un poderoso antioxidante. Para no estropear sus propiedades, es mejor cocinarlas a la parrilla o al horno con la piel, así no tendrás que agregar más grasa, aderezarlas con salsas sin grasa ni azúcar como aderezo de limón y pimienta o soya, y no acompañarlas con papas fritas, aros de cebolla o nachos.
Ingredientes de estas alitas de pollo

Para hacer las alitas de pollo de Dani García también vamos a tener a favor que no vamos a tener que pasar mucho tiempo en la cocina con este plato y que los ingredientes que necesitaremos serán fáciles de conseguir. Así, si queremos hacerlo para, por ejemplo, tres comensales, precisaremos 1.550 gramos de alitas de pollo, 2 cucharaditas de ajo en polvo, una cucharadita de pimentón dulce, un poco de Shichimi o chile togarashi (o cualquier polvo picante que te guste, pimentón picante también es una opción), 100 gramos de maizena, sal, pimienta y aceite de oliva virgen extra.
Cómo ir paso a paso

Si queremos que las alitas de pollo nos salgan igual que las que prepara Dani García hay que ir siguiendo paso a paso todas las indicaciones de su receta. Así, lo primero será colocar las alitas de pollo en un recipiente y salpimentar generosamente por ambos lados. Después se mezcla en un cuenco la maizena, el pimentón dulce, el ajo en polvo y el chile togarashi, y se añade esa mezcla anterior a las alitas, a las que hay que rebozar bien con ella para que todas estén impregnadas de las especias. Hecho esto se pone a las alitas otro poquito de pimienta y un chorro de aceite de oliva, a ser posible virgen extra.
El horneado

Una vez tengamos las alitas de pollo bien condimentadas y preparadas llegará el turno de utilizar el horno para acabar la receta. Para ello se precalienta el mismo a 220º C con la opción de calor arriba y abajo. Se cubre la bandeja del horno con papel de aluminio y se pone encima la rejilla del horno. A continuación se colocan directamente las alitas de pollo encima de la rejilla con la piel hacia abajo y se hornean 15 minutos. Pasado este tiempo se sacan y se les da la vuelta para volver a meterlas durante 10 minutos más. Después hay que poner el grill al menos 5 minutos (hasta que se doren), y ya solo quedaría colocarlas en una fuente, añadir un poco de sal y decorar con perejil picado y ralladura de limón al gusto.
Qué es el shichimi

En estas alitas de pollo versión Dani García hemos utilizado el shichimi, que seguramente mucha gente no sabe bien lo que es. Se trata de una mezcla de especias japonesa que sirve para sazonar todo tipo de platos, desde arroces, fideos, tofu, sopas ramen, etc. El Shichimi togarashi o también conocido como Nanami Togarashi de S&B, por ejemplo, presenta un excelente equilibrio entre el sabor a sésamo, los cítricos, el nori y tiene un buen nivel de picante. Hay qeu tener en cuenta que la cocina japonesa siempre se ha caracterizado por seducir los sentidos y crear fascinantes mundos del gusto, a pesar de la ligereza y sencillez de sus platos.