Belén Esteban ha cambiado mucho desde que comenzó su carrera televisiva. Sin formación previa en comunicación ni experiencia ante las cámaras, se convirtió casi de la noche a la mañana en uno de los personajes más populares del país. Se ganó el apodo de ‘La Princesa del Pueblo’ y consiguió una repercusión en la audiencia española que aún resulta sorprendente. Su éxito se debió a que muchas mujeres de edad similar y clase social media/baja, se sintieron identificadas con ella. Belén estaba siendo protagonista de una especie de culebrón venezolano: joven de origen humilde (recordemos que se crió en Ciudad Lineal, un barrio obrero de Madrid), que se enamora de un hombre adinerado, en lo más alto de su carrera. Se queda embarazada y su familia política la desprecia hasta el punto de que tiene que romper su matrimonio y sacar adelante a su hija con mucho esfuerzo.
DE CLASE HUMILDE A CELEBRITY ADINERADA
Sin embargo la Esteban de hoy está a años luz de aquella de principios de la década de los 2000, ya que tras años de trabajo en los medios y en los programas mejor pagados, ahora es una mujer con un estatus superior y con un caché de muchos ceros. Algo que probablemente se refleje en su ideología política. Aunque la colaboradora, con la naturalidad que la caracteriza, no tiene ningún problema en hablar de estos temas, todavía no ha dejado claro del todo qué papeleta mete en la urna cuando vota. Pero sí ha dejado caer algunas pistas.

CRíTICAS A LAS MEDIDAS DE SEGURIDAD DEL GOBIERNO
Hace unos días Belén Esteban aterrizaba en el aeropuerto madrileño de Barajas después de haber pasado sus vacaciones en Canarias, y no pudo dejar de mostrar su indignación. En el mismo aeropuerto se quejaba a los periodistas de las ‘medidas de seguridad de mierda’ del aeropuerto, donde los pasajeros tuvieron que pasar una hora esperando las maletas, sin personal que vigilase que se cumplía con las distancias. Además mostró su enfado explicando que ninguno de los pasajeros había sido sometido a ninguna prueba y tachó esta falta de medidas de seguridad de vergonzosas. Ignacio Aguado, vicepresidente de la Comunidad de Madrid, le dio la razón en su cuenta de Twitter: “Belén Esteban tiene razón. No hace falta ser ni de izquierdas ni de derechas para darse cuenta de que las medidas de seguridad de Barajas son de ‘chiste’.
PEDRO SÁNCHEZ LE CAE MAL
Pero esta no era la primera vez que Belén hablaba de política, manifestando su descontento con el gobierno socialista. A finales del año pasado dijo estar muy enfadada con el presidente Pedro Sánchez por las medidas que proyectaba aplicar al régimen de autónomos, un grupo de población del que ella forma parte. La colaboradora de ’Sálvame’ se ha quejado en diferentes ocasiones de la gestión del gobierno socialista en varios aspectos, algo que le ha costado alguna que otra bronca, sobre todo con el presentador del programa Jorge Javier Vázquez.

‘YO QUE VOY A SER DE VOX’
Por otra parte, hace aproximadamente un año, en su programa, se estaba comentando la salida del líder de Ciudadanos del hospital por unos problemas de salud. Se habló concretamente de las palabras de Monasterio, presidenta de Vox, que intentó atacar a Albert Rivera utilizando a su pareja, la cantante Malú. Esto no le gustó nada a Belén, que comenzó a despotricar contra este partido sin darse cuenta de que tenía el micrófono abierto.
ENTONCES, ¿A QUIÉN VOTA BELÉN ESTEBAN?
Por quien ha mostrado siempre gran simpatía es por Albert Rivera, aplaudiendo muchas de sus decisiones en directo en ’Sálvame’ o en sus redes sociales. En cierta ocasión público una foto del político con el mensaje ‘me dio buen rollo’. Así qu por el momento parece ser que el partido naranja es el que más se ajusta a sus convicciones políticas, aunque en su última discusión con Jorge Javier, a causa de la crisis del coronavirus, Belén Esteban reveló sin secretos a quien votaba: “He votado a socialistas, a PP y a Ciudadanos”.
