¿Quién al que le guste la cocina no ha hecho nunca un bizcocho? Quizás sea uno de los postres más recurrentes cuando se empieza a cogerle el gustillo a eso de ser tu propio chef. Al hacerlo, la duda que te surge es si hacerlo de naranja, de yogur, de limón… En lo que nadie duda es en que tarde o temprano tendrá que pasar por el horno. Aquí sin embargo vamos a mostrar una receta en la que esto último no será necesario, en la que se podrá ver cómo también se puede hacer en una sartén. Si eres de los amantes de los postres sin horno, este pastel se puede convertir de golpe en tu preparación perfecta, pues puede ser la base de montones de postres fríos deliciosos.
Ingredientes para el bizcocho
Esta receta de bizcocho en sartén también tiene la ventaja de que es muy sencilla y no nos llevará más de 10 minutos su preparación, a los que habrá que sumar otros 25 millones de cocción. Para hacerla necesitaremos como ingredientes, medio kilogramo de harina de trigo todo uso, una cucharada de polvo para hornear, 3 huevos, una taza (250 ml.) de leche, media taza (125 gr.) de aceite de semillas o de oliva de sabor suave y una taza (250 gr.) de azúcar. Además, para untar el molde mantequilla y harina. Como ingredientes opcionales podríamos precisar una cucharadita de esencia de vainilla, una cucharadita de esencia de frambuesa, 50 gramos de pepitas de chocolate, 3 cucharadas de chocolate en polvo, ralladura de 1 naranja, 1 mandarina o 1 limón, 2 manzanas y azúcar glass.
Bol amplio para el bizcocho
Como sucede con la mayoría de recetas de bizcocho, necesitaremos de un bol amplio donde echar los ingredientes secos que formarán el nuestro en sartén. Se hace en el centro un hueco y se añaden los ingredientes húmedos, o sea, la leche, el aceite y los huevos. Con ayuda de las varillas de la batidora, hay que ir incorporando los ingredientes secos a los húmedos con cuidado, para que los secos vayan cayendo poco a poco sobre los húmedos (vamos, que no hay que mezclarlos de golpe). Una vez que tenemos una masa homogénea, se sigue batiendo con las varillas durante unos 5 minutos, para que la masa se llene de aire y el bizcocho quede más esponjoso.
Un toque de sabor diferente
Si queremos dar a nuestro bizcocho un toque de sabor diferente, sólo habrá que añadir alguno de los ingredientes que hemos indicado como opcionales. Por ejemplo, si se quiere hacer un bizcocho de chocolate en sartén, puedes añadir a la masa 3 cucharadas de cacao en polvo, e incluso añadir a la misma unas pepitas de chocolate una vez que tenemos la masa en la sartén. Si se quiere hacer una tarta de manzana en estufa, solo hay que pelar las manzanas, cortarlas en cuadraditos o el láminas y repartirlas en la superficie de la masa del pastel, cuando hayamos echado esta en la sartén.
Últimos pasos de la receta
Una vez que tenemos la masa lista para el bizcocho, se procede a preparar la sartén donde vamos a hacerle untándola bien con mantequilla y enharinándola bien, retirando todo resto de harina. Se echa la masa en la sartén, se tapa y se lleva al fuego, a intensidad media, hasta que notemos que la tapa esté caliente, momento en el que bajamos el fuego más o menos a 1/4 de intensidad o sea, más bien bajito. Entonces se deja la sartén al fuego unos 20 minutos, se destapa, se comprueba que el pastel esté cocido y, si es así, se le da la vuelta como si fuera una tortilla, y se deja destapado a fuego medio 2-3 minutos, pues es sólo para que se dore.
Retoques finales
De la preparación final del bizcocho va a depender para qué lo vamos a utilizar luego. Si es por ejemplo como base para una tarta o pastel decorado, o lo vamos a espolvorear con azúcar glass, que no se vaya a ver, nos podemos ahorrar darle la vuelta, pues con los 20 minutos es suficiente para que esté listo. Si las sartenes son más finas tardarán más, tendrán que estar en ellas más tiempo, y si son más gruesas algo menos. Lo que está claro con esta receta es que no tener horno ya no va a ser un excusa para no hacer postres, pues este es un postre fácil sin horno delicioso.
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