«Había una vez una niña que fue descubierta como actriz cuando solo tenía 12 años. Protagonizó el remake de la película «Juegos de gemelas» que la proyectó artísticamente. Fue creciendo y muchos proyectos tocaron su puerta que la impulsaron a ser una de las mejores actrices. Ha estado nominada al Óscar y a pesar que no ha logrado un galardón, nadie lo descarta en un futuro, debido a que nació para la pantalla», este era el cuento que me hubiese gustado narrar de Lindsay Lohan. La historia fue otra.
Lo que nunca se imaginó Hollywood era que la fama cegaría a un prodigio de la actuación. Condujo su vida sin tener licencia y terminó por estrellarse. Alcohol, drogas, hombres, fiestas y derroche de dinero fueron algunas de las palabras que ocuparon los titulares sobre ella. Sin darnos cuenta pasaron sus mejores años, se convirtió en una adulta y no había hecho nada con su carrera. La mina de oro que encontró la industria del cine y la televisión se había extinguido.
¿Cómo no pararon su fracaso?

La presión de la industria fue peligrosa para Lindsay Lohan. La actriz no supo ver a tiempo que sus estadías en hoteles, sus constantes asistencias a las discotecas en compañía de personas mayores que ella y la vanidad, la llevarían a los vicios. Como consecuencia su comportamiento se hizo insoportable. Los directores de grandes películas no querían a una joven que perturbara el largometraje por sus caprichos.
Lamentablemente existe un momento de éxito en los actores que deben aprovechar para sacar el mayor provecho. La insistencia en mejorar en la interpretación de los personajes es crucial porque es el recurso que queda cuando la juventud se va. Aunque Lindsay Lohan aún está joven, tiene 34 años, para lograr una verdadera transformación en su vida y carrera debe primero tomar conciencia.
Cuando tenía 22 años realizó un comentario en donde alegaba que los culpables de su fracaso eran los medios y los fans enfermos. «He cambiado. Si la gente simplemente deja en paz mi vida personal-porque no es tan interesante- entonces podría llegar a un buen papel», expresó.
Cierto o falso, sus fans todavía esperan un acto de reinvención de la también cantante. Son muchos los aplausos y halagos que sus seguidores están dispuesto a ofrecer.
El gran éxito de «Juego de Gemelas»

Juego de Gemelas mostró a Lindsay Lohan a los grandes productores de televisión, quienes la introdujeron en la serie «Bette«. Más adelante vuelve a la gran pantalla con «Ponte en mi lugar». Otros títulos de cintas son «Chicas malas», «Herbie a tope», «Devuélveme mi suerte» y «Bobby».
¿De qué trató Juego de Gemelas?
Lindsay Lohan hizo dos papeles en este largometraje, por lo que aumentó el desafío de la actuación. La trama se centró en dos hermanas gemelas, Hallie y Annie que tras el divorcio de sus padres, fueron separadas un poco después del nacimiento. En un campamento, teniendo una edad aproximada de 11 años, las niñas se encuentran y emprenden la travesura de cambiar de familia para conocer al progenitor que no tuvo la oportunidad de estar en sus vidas.
El film tiene comedia, chispa y mucho derroche de talento por parte de la actriz estadounidense. Una producción interesante y que, por supuesto, debes ver. Este trabajo pertenece al año 1998.
Lo que no sabes de «Juego de Gemelas»

Juego de Gemelas es el remake de la película «Operación cupido» de 1961. Obtuvo tanto éxito que recibió dos nominaciones a los premios Óscar. La gemelas originales eran rubias con vestidos rosas y en el remake eran pelirrojas con vestidos amarillos.
Existe una escena en donde Lindsay Lohan se perfora la oreja. Tuvo que hacerlo realmente. La pequeña prodigio ganó el protagónico a actrices como: Mara Wilson, Michelle Trachtenberg y Scarlett Johansson.
El famoso saludo entre Annie y Martin, el mayordomo que se refleja en la cinta, tuvo 18 movimientos. Este fue el primer protagónico para Lohan.
Los escándalos más sonados

En 2008, se capturaron imágenes de Lindsay Lohan embriagada. Estaba inconsciente después de una noche bastante movida. Se dio a conocer a la prensa su problema con el alcohol.
Después de seguir bebiendo y manejar sin control, las autoridades le pusieron un brazalete en el tobillo como una forma de controlarla.
2010 fue un año que sorprendió a todos. Apareció en el cierre del desfile de la firma Emanuel Ungaro, para la cual estaba colaborando como diseñadora, y su rostro fue primera plana en los diarios porque estaba deformado como consecuencia de inyecciones de colágeno en los labios e injertos de pómulos. Físicamente se había deteriorado.
Tuvo una relación con Dj, Samantha Ronson. En una producción musical » A Little More Personal (2005)» , reveló su tormentoso vínculo con su padre alcohólico. En 2011 cumplió una fianza desencadenada por el robo de un collar de oro valorado en 2500 dólares.
En 2014 declaró haber sufrido un aborto espontáneo en el canal de Oprah Winfrey. No se reveló el nombre del padre.
Una lista de hombres que para nada sorprendió al mundo

A la prensa llegó una lista que contiene 150 nombres que mantuvieron relaciones sexuales con Lindsay Lohan. Un material que no se ha confirmado por parte de los involucrados. Figuran las siguientes estrellas: Justin Timberlake, Adam Levine (Maroon 5), Jamie Dorman (50 sombras de Grey), Lucas Haas (Inception), el difunto Heath Ledger (Batman: el caballero de la noche), Joaquin Phoenix (Joker) y Colin Farrel (Brujas).
Este documento generó polémica en las redes sociales debido a las críticas manifestadas por algunos usuarios hacia a la actriz. Como apoyo a Lohan mencionaban que si hubiese sido un hombre el dueño de ese papel, muchos se sintieran orgullosos. Verdad o mentira, forma parte de uno de sus tantos escándalos. Su mala reputación la ha mantenido en el medio, sus excesos la han llevado a protagonizar titulares, lamentablemente. De lo contrario, hubiese desaparecido.
Repito lo que comencé al principio de este artículo, me hubiese encantado contar otra historia. Creía en una Lindsay Lohan apasionada por su talento. Una prueba más que el don no es suficiente, hay que trabajar duro.