La decisión de Rocío Carrasco de hablar tras 25 años ha vuelto a remover un trágico episodio entre madre e hija que cambió para siempre la vida de la hija y la nieta de la más grande. Un episodio que durante años se mantuvo oculto y que hoy vuelve a ser actualidad. Una paliza, fuertes insultos y la guardia civil fueron los ingredientes que destrozaron para siempre la vida de Rocío carrasco, y que ahora se sabe la llevaron a un intento de suicidio.
Rocío Flores se enfrenta a Rocío Carrasco
> Hasta ahora Rocío Carrasco nunca había querido contar qué fue aquello tan grave que destrozó su vida para siempre. Nadie del entorno lo ha hecho, aunque Terelu ha confesado en Viva la Vida que sabía el episodio desde hace años: “ha sido difícil estar solos en esto. Lo difícil ha sido mantenerse sin hablar, pero ha sido su voluntad”.
El primero en sacar a la luz la tragedia familiar fue el portal digital Vanitatis. Se atrevieron a hacer público un tema hasta entonces tabú. Una sentencia del Juzgado de Menores número 4 de Madrid vio la luz pública, y en ella quedan retratados los episodios más duros y desconocidos entre la hija y la nieta de Rocío Jurado. Te mostramos la prueba y te contamos todo lo que sucedió, en la siguiente página.
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Una sentencia demoledora
> “Sobre las 8:00 h del día 27 de julio de 2012, encontrándose la menor en el domicilio familiar junto a su madre, la pareja de ésta y su hermano, inició una disputa con aquella en el transcurso de la cual le propinó varios golpes, llegando incluso a tirarla al suelo, para posteriormente seguir golpeándola, dándole varias patadas. Como consecuencia de los hechos, Rocío Carrasco sufrió policontusiones con equimosis en la región frontal derecha, con edema en ambas muñecas, en muslo derecho, en el antepié derecho y un hematoma en el segundo dedo del pie derecho, para cuya curación únicamente precisó de una primera asistencia facultativa y de las que tardó en sanar ocho días, uno de los cuales estuvo impedida para el ejercicio de sus ocupaciones habituales”.
Aquel 27 de julio del año 2012, que Rocío Carrasco confirma que puede que ser el peor día de su vida, se ha convertido en una pesadilla de la que ahora, años después la hija de la cantante ha sido capaz de despertar. Pero aún hay más detalles y hechos entre madre e hija que te sobrecogerán el corazón si sigues leyendo.
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Paliza e insultos continuados de la hija hacia la madre
> Han pasado casi nueve años desde que Rocío Carrasco acudió a los tribunales para demandar a la que ha sido su niña del alma, Rocío Flores. Concretamente el 27 de julio del año 2012, una disputa entre madre e hija por una nectarina en la cocina lo cambió todo. No fue una discusión cualquiera. Los insultos pasaron a ser gritos, y los gritos, golpes. Según Vanitatis, fue Rocío Carrasco la que cayó al suelo.
La primera vez en la cocina y la segunda, impidiendo que su hija saliera escopetada de casa. No pudo impedirlo: la joven salió hacia el coche que le esperaba en la puerta de casa. El chófer, que posteriormente fue llamado como testigo, atendió a la joven que entonces “estaba muy nerviosa”. Según el medio citado anteriormente, Rocío Flores le pedía con ansias que le llevara al cuartel del Guardia Civil. Pero en vez de eso la llevó al curso de verano que estaba haciendo.
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«Guarra, puta, maltratadora»
> Fue Antonio David quien llevó a su hija a cuartel de la guardia civil, atribuyendo a su madre un delito de malos tratos. Ante la benemérita, la niña relató que su madre le golpeaba y la cogía del cuello habitualmente. Por su parte, Rocío Carrasco optó por no denunciar a su hija, pero si acudió a un hospital para que se le reconocieran las lesiones. Este acto fue el desencadenante de un adiós definitivo entre madre e hija. Meses después fue la fiscalía quien abrió causa por vía penal. Las tornas se volvieron en contra de la hija de Antonio David que fue declarada culpable de agresiones e insultos a su madre.
“Guarra, puta, mi padre tenía razón, eres una maltratadora psíquica. A esta casa no me trae ni la policía, ni el juez, ni tu padre y tu madre que están bajo tierra”, son algunas de las frases que se pueden leer en la sentencia publicada por Vanitatis.
Según publicó el portal, durante el procedimiento todo quedó esclarecido: los informes psicológicos aseguraban que Rocío Flores estaba condicionada y aleccionada por su padre y que llevaba 3 años maltratando a su madre. Antes del fatídico episodio de la nectarina, las peleas entre madre e hija eran continuadas. El juez acabó archivando la causa contra Rocío Carrasco.
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Rocío Flores condenada por el juez
> Tras meses de suplicio, Rocío Flores fue condenada en 2013 por “un delito de maltrato habitual, un delito de maltrato, una falta continuada de amenazas y una falta continuada de injurias”. Esta sentencia provocó una sanción correctiva, que evidentemente provocaron una sanción correctiva.
Rocío Flores, menor en 2013 fue condenada: “60 horas de prestaciones en beneficio de la comunidad” que de no cumplirlos se substituirían por seis meses de libertad vigilada, como finalmente ocurrió. La libertad vigilada acabó el 2 abril de 2014. Se lleva años afirmando en medios de comunicación que Rocío Carrasco renunció a la custodia de su hija, pero no fue así, pues el juez ordenó temporalmente la separación física entre ambas mujeres tras la agresión doméstica de la hija a la madre.