Corría el año 2001 cuando, tras once años de matrimonio, Nicole Kidman y Tom Cruise se divorciaban. Por aquel entonces, se trataba de todo un drama. Una de las parejas de moda del momento de Hollywood, lo dejaba. Sin embargo, parece que no hay mal que por bien no venga, porque tras esa separación, Kidman ganaba su Oscar a Mejor Actriz por la película, Las Horas. Pero para ganarlo, tuvo una ayuda extra -que no le hubiera gustado tener- porque casi algo se rompió por dentro a la actriz. ¿De qué se trata?
Se conocieron en la peli ‘Días de Trueno’ y se separaron tras su último largometraje juntos…

> Antes de que muchos vivieran el drama de que Angelina Jolie y Brad Pitt rompieran, antes de ellos hubo otra pareja de Hollywood que acaparaba todas las miradas y portadas. Se trataba de Tom Cruise y Nicole Kidman. Su relación comenzó cuando ambos compartieron planos en la película, Días de Trueno. La última película en la que coincidieron juntos, el thriller erótico dirigido por Stanley Kubrick, Eyes Wide Shut, fue el preámbulo de su divorcio.
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Por aquel entonces, Tom Cruise se involucró más y más en la Cienciología

> Se rumoreaba que cuando los dos rodaron esa película, su relación ya hacía aguas. Algo que la propia Nicole Kidman negaba con rotundidad a la prensa del momento, asegurando que «estaban felizmente casados». Pero llegó el año 2001, el matrimonio decidía separarse y los motivos reales fueron totalmente un misterio.
Fue entonces cuando la rumorología se ponía en marcha. La implicación del actor de Misión Imposible más y más en la iglesia de la Cienciología y su religión, pudieron ser el momento exacto en el que ambos decidieran tomar caminos por separado. Aunque en alguna que otra ocasión, Nicole Kidman haya apoyado públicamente a los hijos que tuvo con el actor, Isabella y Connor, ambos adoptados, estos fueron educados en esta religión.
¿Se sintió la de Hawái apartada por no seguir los mismos preceptos? Nunca lo sabremos…
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El papel de Virginia Woolf con el que se acrecentó más y más su depresión post-Cruise

> Lo que si sabremos es que, tras su divorcio con el conocido actor, Kidman sí que padeció una fuerte depresión. Propiciada sobre todo por la interpretación que hizo de la escritora Virginia Woolf en la película Las Horas. Hay que recordar la historia de la escritora británica, que quitaba la vida en 1941, suicidándose tras una fuerte depresión. Con un abrigo, llenándose los bolsillos de piedras, la escritora se ahogaba en el río Ouse, cerca de su casa.
Ahora que ha vuelto el debate de la importancia de prestar atención sobra la salud mental de las personas, Virginia Woolf sufrió durante su vida una enfermedad mental: trastorno bipolar. Pues frente a este reto, tal y como ha confesado Nicole Kidman para el programa This Cultural Life de la BBC Radio 4 de Reino Unido, este papel no hizo más que agravar su propia depresión que padecía tras separarse de Cruise.
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Sin dobles, Nicole Kidman interpretó el suicidio de la escritora… No siendo consciente del peligro que corría

> Como un «recipiente abierto», así es como ha confesado Kidman cómo se encontraba, un año después, concretamente en 2002, cuando daba vida a la escritora británica. «Estaba en un lugar como alejado, deprimido, como si no estuviera en mi propio cuerpo» ha relatado la actriz. «Estaba abierta a entenderla, creo que quizá esta es la belleza de la vida como actriz» ha sentenciado.
Incluso la propia Nicole Kidman no utilizó ningún doble para realizar el momento en el que Virginia Woolf se quitaba la vida. «No sé si alguna vez pensé en el peligro. Estaba tan metida en su piel… Me puse las piedras en los bolsillos y me metí en el río. Una y otra vez. Probablemente no me di cuenta lo suficiente del peligro que corrí», ha añadido.
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En 2003, la intérprete se alzaba con el preciado Oscar a Mejor Actriz por este papel

> Eso sí, este papel le valió que ganara el Oscar a Mejor Actriz por esta misma película, en la que compartía reparto con dos titanes de la actuación como lo son Julianne Moore y Meryl Streep. Además de hablar sobre su experiencia que vivía en concreto con Woolf, la actriz también ha aprovechado para reflexionar sobre su salud mental. «He profundizado y atravesado muchos paisajes diferentes de salud mental, de pérdida, de alegría…», ha explicado para la BBC la intérprete.