La reina Sofía cumple 79 años este jueves 2 de noviembre. Una edad que asume en la más absoluta soledad. Lejos de su trono, la reina lleva una vida muy distinta de la que tuvo.
Su paso por la corona española no es más que un espejismo para esta mujer que fue todo un ejemplo a seguir. Muchas son las especulaciones sobre su vida actual y pocos saben la verdad.
Se refugia en Londres
La reina Sofía pasa largas temporadas en la ciudad de Londres. Tiene un apego especial a este lugar porque aquí fue donde se crió. Muchos de sus amigos y familiares viven todavía entre sus calles. Durante décadas ha sido el lugar en el que se refugiaba la reina cuando las cosas no iban del todo bien con su marido.
Todavía conserva una casa cerca de donde vivía con su padre, Pablo de Grecia, y que comparte con su querida hermana Irene. La confianza que esta ciudad le ofrece le permite sentirse una habitante más. Sofía puede pasar totalmente desapercibida y olvidar su pasado que todavía está muy presente.
Sofía apenas ve a sus nietas
Efectivamente, así es. A pesar de que muchas voces apuntaban que doña Sofía tenía ubicada su residencia habitual en Londres, lo cierto es que vive en Zarzuela. El Palacio está a menos de 500 metros del Pabellón del Príncipe, lugar en el que viven los reyes de España, Felipe y Letizia y junto a sus hijas, las infantas Leonor y Sofía.
Cuando los monarcas viajan fuera de Madrid por cuestiones profesionales (e incluso personales) y a pesar de tener servicio expreso para las infantas, piden a Paloma Rocasolano, madre de Letizia, que se quede al cuidado de las pequeñas, algo que escuece profundamente a la madre del rey Felipe: «Casi no me dejan verlas. Sin embargo, la madre de Letizia se pasa allí el día», comentó, dolida, la reina Sofía.
Continuos desplantes del rey
El rey durante todo su mandato, la trató como una reina sin amor. La relación entre ambos hacía décadas que se había roto y Sofía solo pensaba en acabarla. En Londres escuchaba a su familia que una y otra vez la incitaban a continuar con la relación. La corona de la monarquía está por encima de cualquier sentimiento.
Sofía aguanto lo inaguantable y mostro una imagen totalmente falsa de su amor. Aunque todo el país sabía que allí solo habían las fotos oficiales y después cada uno se iba a su aire. Ahora más que nunca se ha visto claro que esta relación simplemente cubría el espacio de un trono demasiado precipitado.
Viaja con lo mínimo
Su vida en Londres es totalmente austera. Viaja con lo mínimo y solo se lleva una persona de servicio. Una integrante de la casa real podría tener un palacio entero o una gran casa, pero en este caso Sofía quiere vivir con lo mínimo y ser una ciudadana más. Es una de las claves para pasar desapercibida.
Solo necesita a una persona que la peine y la maquille para estar siempre perfecta. Además de realizar las tareas del hogar, que tantos años de Monarca han hecho que esté un poco desentrenada para hacerlas. Con lo mínimo Sofía puede volver a sonreír y sentirse una mujer con fuerzas para seguir siendo una abuela modelo.
Alta sociedad griega
Su presencia en Londres como miembro de una casa real europea es una realidad. Su familia está allí desde hace décadas y siempre recibe alguna que otra invitación. Los actos oficiales a los que asiste ya no son como reina de España, si no que vuelve a ser Sofía de Grecia como lo era antes.
Su hermano y sobrino son los encargados de organizar la agenda de su tía y hermana. La vimos sola y hermosa en la boda de Filipos Lemós y Mariana Goulandrís una de las familias griegas más importantes de Londres. Como cualquier mujer jubilada no tiene por que quedarse en casa, sale a divertirse.
El ocultismo y el tarot
Una de las aficiones que siempre ha despertado el interés de la reina es todo lo referente al mundo del tarot y al ocultismo. Son disciplinas que, la que fue reina, admira. Siempre que puede recurre a este tipo de elementos para descubrir partes ocultas de su propia familia. En Londres frecuenta siempre las mismas profesionales.
La seguridad que adquiere con estas consultas le da la confianza necesaria para seguir con su vida. Tal vez en ellos supo que los problemas de su hija con la justicia no tendrían mayores consecuencias. Las visiones de los tarotistas son siempre muy acertadas y en el caso de Sofía parece que siempre dan en el blanco.
Coincidencia con su marido
Este año 2017 ha sido uno de los períodos en los que más veces hemos podido ver a Sofía con Juan Carlos. Todo parece indicar que era una estrategia premeditada de la Zarzuela para mostrar una imagen de familia unida frete al caso Noós. Desde 2014 que no se habían visto nada unidos.
En mayo les pudimos ver la mar de sonrientes en el 40 aniversario de la Fundación Reina Sofía, un homenaje a su persona. Fue una de las pocas veces en que los cuatro reyes estuvieron juntos. Intentaban mostrar continuidad y cierta complicidad entre ellos. El tiempo cura las heridas, pero no lo suficiente.
Los escándalos de Juan Carlos
Por desgracia, esa paz no duraría demasiado. En verano volvió a salir a la luz otra supuesta deslealtad de su marido. A mediados de julio, Juan Carlos aparecía de vacaciones en Irlanda en compañía de Marta Gayá. Una mallorquina que ha sido y parece que es “muy amiga” del que fue monarca.
Nunca habíamos tenido ninguna prueba gráfica de esta relación que arranca en la década de los 90. Ahora se comprueba la fidelidad de las amigas del rey y el gran número de infidelidades a las que sometió a su mujer. Sofía puede estar ahora a sus 79 años más tranquila que nunca, lejos de estos escándalos y relajada en el Londres que la vio crecer.