Pepe Navarro tuvo su gran momento de expansión durante los años 90. Si vemos alguna de sus grandes apariciones televisivas seguro que recordamos esa voz profunda y esa apariencia de macho alfa que nos conquistó. Era un hombre cargado de carisma y con un talento sorprendente. Su vida personal ha sido la que nos ha permitido saber de él durante estos años. Algunos proyectos han hecho que sea un poco más visible, pero, de todas formas, corre un serio peligro de extinción televisiva. Repasamos la vida de Pepe Navarro y sus últimos acontecimientos.
Esta noche cruzamos el Mississipi
Mantenerse despiertos durante la década de los 90 era casi una obligación. Llevaba la hora de ver uno de los mejores programas que ha emitido Telecinco a lo largo de su historia. ‘Esta noche cruzamos el Mississipi’ capitaneado por Pepe Navarro tuvo su momento de esplendor durante aquella década.
La audiencia le fue fiel hasta el final con cambio de nombre incluido. Las polémicas se sucedían en plató y eso hacía que todo el mundo estuviera pegado a la televisión. El mal y el bien se encontraban en la figura de Navarro. Su voz de lo más sensual y ese guion que parecía improvisado nos transportaban a toda una dimensión desconocida.
La leyenda del Mississipi
El éxito del programa fue tal que más de una década después la editorial Planeta decidió hacer un libro de aquella experiencia. En ‘La leyenda del Mississipi’ Pepe nos contaba toda la experiencia de ser el cabeza de turco de un programa como el que creó. Demasiada presión para un solo hombre.
La bonanza de esta noticia no le duró mucho a Navarro. El libro no salió a la luz en esa editorial. El motivo era un tanto oscuro: Planeta es propiedad de Antena 3 y allí Pepe Navarro no era bienvenido. La verdad es que el presentador acabó su carrera en la televisión de esa época con más enemigos que amigos.
Antena 3 y Planeta le han vetado
Su proyecto de libro sacó a la luz la parte más oscura de su etapa en la televisión. Algunos de los secretos más ocultos de este formato no debían ver nunca la luz. Las amenazas sobre él empezaron a caer en cada nuevo movimiento que hacía. Pepe se sintió totalmente perseguido por el veto de la cadena.
Según afirma en una entrevista, todo aquel que dependía de esta cadena o empresa que quería hacerle una entrevista, era inmediatamente censurado. No quería que Pepe dijera la verdad y eso avivó aún más los rumores de que en el plató de ‘Esta noche cruzamos el Mississipi’ había habido algo más que palabras.
Un hombre libre
La explicación de Pepe Navarro sobre esta serie de ataques a los que fue sometido. Con algún que otro artículo en su contra en medios nacionales era su capacidad para no pertenecer a ningún grupo. No quería formar parte de esa flora y fauna que quería que fuese como ellos. Pepe quería ser libre.
El poder según Navarro es el que decide qué personajes son los que triunfan y cuáles deben abandonar la televisión. En su caso fue uno de los invitados a decir adiós a la pequeña pantalla. Cerraba un capitulo de lo más intenso, en el que además de una serie de problemas de faldas se llevaba consigo más de un enemigo.
El coste de sus programas
‘Esta noche cruzamos el Mississipi’ se llamó posteriormente ‘La sonrisa del pelícano’. Echo el cierre por desavenencias internas, ese poder que según Navarro lo controla todo, llego para aniquilar este formato de éxito. Había llegado la hora de decir adió a unos años de prosperidad y de buenas cifras.
El programa costaba en su día 3.000 millones de pesetas anuales. Todo un récord en su momento que solo era superado por los beneficios que se generaban. El tripe, es decir, 9.000 millones de peseta, era lo que la cadena ganaba por poner a Pepe Navarro en antena cada temporada.
El padre del late night
Pepe Navarro antes de su extinción televisiva hizo lo impensable, instauro el late night en España. En unos años de prosperidad las familias después de la cena disfrutaban de un programa de entretenimiento como nunca antes habían visto. Inspirado en el modelo americano era una máquina de generar polémicas.
Entrevistas un poco subidas de tono y personajes imposibles. El espectáculo, humor y la controversia se unían en un programa especial. Navarro fue el padre de esta tendencia que continuaron otros, pero no de la misma manera. La voz de Pepe era única y su carisma, también. Se movía entre el bien y el mal para hacernos disfrutar.
Tachado de Telebasura
Una de las acusaciones directas contra Pepe Navarro y su programa fue que había destapado la caja de Pandora televisiva. En su programa el morbo y la visión un tanto decadente de todo lo que el mostraba le valió la primera etiqueta de Telebasura. Todos sus enemigos se acogieron a este término para hundirle.
El final del programa no fue un problema de audiencia, sino más bien un problema ideológico. Muchos no compartían el liberalismo y la visión de un mundo plural que tenía Navarro. Hasta ese momento se mostraban solo unos ideales que los demás compartían. Pepe Navarro nos abrió los ojos para hacernos ver un universo distinto. Lástima que se extinguiera tan pronto.