Al igual que cualquier tipo de premio, los Premios Goya han creado más de una polémica alrededor de sus nominaciones ya que, como muchos aseguran, están plagadas de injusticias. Pero como solemos decir, no todos pueden ganar, por lo que es completamente normal que algunas nominaciones se queden simplemente en eso, en nominaciones.
A continuación vamos a conocer a algunos actores que aún no han ganando ninguno de los Premios Goya pese a merecerlo y a pesar de haber estado nominados en más de una y de dos ocasiones.
Ángela Molina, cinco nominaciones y ningún Goya en casa

Ángela Molina es una de esas actrices que nunca ha conseguido llevarse un premio de este calibre a casa, pese a merecerlo más que nadie, y es que la madrileña, que procede de una gran familia de artistas, ha estado nominada en cinco ocasiones a los Premios Goya, cinco veces que se ha ido de vacío.
Ha estado nominada por La mitad del cielo, Luces y sombras, Las cosas del querer, Carne trémula y Blancanieves, películas que han triunfado pero que no le han dado a la artista su ansiado premio.
Eso sí, Ángela Molina se ha llevado otros premios a casa como, por ejemplo, la Concha de Plata a la mejor actriz, por la película de La mitad del cielo, o el David de Donatello, que son los premios Goya de Italia, por Camorra: Contacto en Nápoles.
Imanol Arias, cuatro nominaciones

Imanol Arias, también conocido como Antonio Alcántara desde hace ya diecisiete años, es otro de los actores que han estado nominados a los Premios Goya pero que no han conseguido llevarse la estatuilla para su casa, aunque para algunos seguro que se lo merecía.
Imanol ha estado nominado a estos premios por El Lute, tanto por la primera parte como por la segunda, por A solas contigo y por Intruso. Ninguno de estos papeles le otorgó el premio al actor. ¿Veremos algún día cómo le dan el Goya de Honor? A este paso podríamos decir que sí, que es el único Goya que podría ganar.
Jordi Mollà, cuatro nominaciones a los Premios Goya

Jordi Mollà se aleja cada vez más del cine español, ¿Será por no haber obtenido aún ningún Premio Goya? Aunque este último año ha participado en la película de Antonio Cuadri llamada Operación Concha. Aún así, Jordi Mollà aún no ha obtenido su premio por su larga trayectoria.
El actor catalán ha estado nominado por La Celestina, La buena estrella, Segunda piel y El cónsul de Sodoma. ¿Lo veremos alguna vez subir a recoger alguna estatuilla al escenario? El actor espera que sí, o al menos es lo que ha dejado caer en más de una ocasión y por ello ha vuelto a rodar una película española.
Juan Diego Botto, el argentino nacionalizado con cuatro nominaciones

Aunque Juan Diego Botto nació en Argentina, podríamos decir que es tan español como tú y como yo ya que se vino para España cuando era tan solo un niño (aunque el acento argentino le duró hasta la adolescencia y más, podemos verlo en la película de Martín «Hache»). Es por eso por lo que su carrera como actor ha tenido lugar en España.
Juan Diego también ha estado nominado en más de una ocasión a los Premios Goya, pero aún no ha resultado ser el ganador en ninguna de estas nominaciones. Estuvo nominado por Historias del Kronen, Pleniluio, Vete de mí e Ismael. ¿Conseguirá alguna vez la estatuilla?
Loles León, tres nominaciones

Loles León es otra de esas actrices españolas que no se sienten reconocidas por la Academia ya que nunca le han dado el placer de ser la ganadora de uno de los Premios Goya. La actriz se ha encasillado en la pequeña pantalla, concretamente en las comedias, pero aún seguimos viéndola en algunas películas de la gran pantalla (La reina de España, de 2016, ha sido su última película).
Loles ha estado nominada por tres películas; La niña de tus ojos, Átame y Libertarias, pero no ha tenido la suerte de poder subir a recoger un premio, aunque aún no es tarde, ¡A Loles le queda mucho por ofrecernos!
Goya Toledo, tres nominaciones

Gregoria Micaela Toledo Machín, más conocida como Goya Toledo, también ha estado nominada en los Premios Goya y también se ha ido en todas las ocasiones, tres para ser exactos, con las manos vacías a casa. La actriz y modelo de 48 años aún tiene una carrera prometedora (más aún) por delante para conseguir una estatuilla, aunque ya le gustaría tenerla en casa.
La actriz ha estado nominada por Mararía, donde obtuvo una nominación como mejor actriz revelación, por Maktub, una película que os recomiendo ver, y por Marsella. ¿Será la cuarta nominación la vencida?
Antonio Banderas, cuatro nominaciones y el Goya de Honor

Antonio Banderas, uno de nuestros actores más internacionales, no ha recibido un Goya por nominación en su vida, aunque sí le dieron el ansiado Goya de Honor en el año 2014. Es extraño que este gran actor no haya ganado en ninguna ocasión pero, como dijimos antes, unos ganas y otros pierden.
Antonio estuvo nominado en cuatro ocasiones por las películas de El Matador, Átame, Two Much y La piel que habito. Ninguna nominación dio resultado. Eso sí, al menos tiene en su casa un Goya que puede admirar siempre que quiera recordar su tierra natal, España.
Verónica Sánchez, de Los Serrano a los Premios Goya

La guapísima Eva de Los Serranos también ha estado nominada en varias ocasiones a los Premios Goya, pero en ninguna ocasión ha conseguido subir al escenario para llevarse el premio a casa. Verónica Sánchez, que es su nombre real, empezó en el cine muy jovencita, en el año 2003, aunque no fue más conocida hasta que en ese mismo año fue seleccionada para hacer el papel de Eva, la hija de Belén Rueda, en la popular serie de Los Serrano.
Verónica ha estado nominada en tres ocasiones, la primera como mejor actriz revelación en el año 2003 con la película Al sur de Granada. Las siguientes veces fueron en 2005, en la película de Camarón, y en 2009 por la película de Gordos.
La actriz aún tiene 40 años y mucha carrera por delante, así que no es de extrañar que la veamos recibiendo una estatuilla en los próximos años.











Lo que se le ha explicado a la joven es que, después de sus palabras, las seguidoras de la tonadillera no iban a comprar prendas, al haberla descalificado públicamente. De hecho, Isa se encuentra totalmente hundida ante esta situación, tal y como exponen en la revista. «Es injusto, estaba trabajando mucho y tenía mucha ilusión por tener futuro fuera de las exclusivas. ¿Por qué Isabel Pantoja le quita esta salida si tanto se enfada porque concede entrevistas?».









Tan solo quedan cinco días para saber quién será
El nuevo enamorado de la vida tiene el nombre de Gustavo González. Siempre relacionado con el mundo del corazón, ahora se ha visto de entrevistador a entrevistado. El pasado sábado se pudo ver totalmente entregado a la causa de María Lapiedra, defendiéndola a capa y a espada.
Una de las cosas que más han preocupado en todo momento a Gustavo González ha sido el cuidar todo lo posible a su familia. Tanto a sus hijos como a su todavía mujer, ha intentado mantenerles al margen de todo lo que se ha ido cultivando en torno a María Lapiedra, y, sobre todo, evitar hacer cosas que les duelan.
Hay quienes apuntan a que, detrás de Gustavo González y María Lapiedra se esconde todo un gran montaje. Un hecho que les ha servido para salir a la luz, ganar protagonismo y embolsarse jugosas cantidades de dinero en sus cuentas. Pero lo cierto no es eso exactamente, y es que, al menos Gustavo, está tremendamente enamorado de María Lapiedra.
La verdad detrás de todo esto reside en los cachés que Lapiedra se está embolsando. Todo esto le está beneficiando enormemente, y lo que busca y pretende es sacarle todo el
Quién se sitúa detrás de todo esto, en la cúspide de la pirámide, es María Lapiedra. Ella, que
Algo que estaría pretendiendo negociar María sería lograr que el trío acabara pasando la primavera en Honduras. Así, no solo se aseguraría el estar ella, sino que, con los tres en la aventura, seguramente la expectación y el morbo por verles desenvolverse juntos en tan pocos metros cuadrados, provoque que no se queden hasta la final.
Este coche de hacer dinero está controlado por María Lapiedra, que es quién está al volante, pero sin lugar a dudas, el combustible para que todo esto funcione lo echa Gustavo González. Él está rellenando constantemente, sin darse cuenta y embelesado por la belleza de María, el depósito del carburante del coche.

















































































































La artista fue una de las que tuvieron serios problemas para poder encontrar trabajo en una época de su vida. Y todo fue por culpa de la relación que mantuvo con
La suya fue otro caso clarísimo de mano negra. El presentador estaba en su momento dorado en Televisión Española. Cada año, era uno de los encargados de presentar las campanadas de Nochevieja, y había logrado grandísimos hitos en TVE. En nuestra retina todavía resuenan algunos de aquellos programas míticos que presentó.
El actual presentador de ‘Cuatro Milenio’ también ha sufrido lo que es que una mano negra péndula sobre su persona. Todo comenzó cuando llegó a la Cadena SER, y en su programa, ‘Milenio 3’, pasaban cosas sobrenaturales. De hecho, en su propio estreno, todos los archivos sonoros, preparados para el programa, desaparecieron a escasos minutos del directo.
Ha sido, sin duda, una de las presentadoras más queridas del panorama español. Y, de la noche a la mañana, despareció. Casi se podría decir que se le hubiera tragado la tierra. Triunfó muchísimo con grandes programas, como ‘Fama, ¡a bailar!’ o ‘Pekin Express’. Pero, después, poco más se supo de ella hasta hace bien poco.
El presentador tuvo un grandísimo éxito con formatos como ‘Furor’, sin embargo, de repente, desapareció de la televisión y regresó con un formato muy pequeño, en Intereconomía. Un cambio muy muy grande para un presentador que parecía dispuesto a comerse el mundo por todos lados.
La polémica presentadora y artista musical ha tenido muchísimos vaivenes profesionales. Llegó a presentar formatos infantiles de gran éxito en los noventa, pero con el paso de los años, su imagen se ha ido desgastando hasta la que tenemos hoy. Lo cierto es que nunca se dio una explicación a su extraña desaparición de televisión, algo que hace pensar en la presencia de una mano negra.












