El filete empanado es un clásico de todos los hogares y casi todos los hemos catado en casa durante la infancia y los hemos replicado con el paso de los años en nuestras propias cocinas. Pero por ser un plato popular no resulta más sencillo, al menos encontrar el punto perfecto en el que queda jugoso, apetecible y sabroso. Si quieres mejorar su técnica o este plato se te resiste, hoy te mostramos los mejores trucos para hacer el mejor filete empatado en tu propio hogar.
El tipo de empanado

Lo primero que debes hacer a la hora de elaborar la receta del filete empanado es precisamente escoger el tipo de empanado que vas a realizar, y para ello no hay truco mejor que conocer todas tus posibilidades. Puedes decantarte por el empanado a la inglesa, cuando el filete después de ser enharinado y antes de pasar por el pan rallado, se reboza en salsa inglesa para fritura. La base es el huevo batido con aceite de oliva o girasol y en ocasiones con un poco de agua, leche o cerveza. Este tipo de empanado también lleva especias como la pimienta o la mostaza y un poco de sal.
Otra opción muy popular es el empanado a la milanesa pero, ¿sabes realmente cuál es la diferencia? En este tipo de empanado el filete se pasa primero se pasa por harina, después por huevo y finalmente por una mezcla de pan rallado y queso parmesano, este último es el gran toque diferencial. La proporción recomendada de queso parmesano y pan rallado es de un tercio de queso sobre el volumen del pan.
El tipo de harina

Una vez escogido el tipo de empanado que deseas hay otra cosa que no debes dar por sentado para elaborar un filete perfecto, y es el tipo de harina que utilizarás en la receta. Y es que además de la popular harina refinada de trigo también podrás optar por una harina del empanado diferente y aportar distintos sabores al resultado final o, por ejemplo, convertir tu filete empanado en un plato apto para celíacos.
La harina de garbanzo, por ejemplo, aporta un sabor y una textura diferentes a la harina tradicional, y probando esta opción es posible que conviertas en un plato excepcional tu filete de siempre. Otras harinas como la harina de centeno, la harina de espelta o la harina de arroz dan un color diferente al resultado final, si pruebas estas opciones también podrás obtener un resultado novedoso.
Filete fino y carne muy limpia

Si quieres degustar otro tipo de elaboración a la plancha o receta “vuelta y vuelta” el grosor del filete es relativo o incluso al gusto. Pero en el caso de los filetes empanados la cosa cambia un poco, ya que la carne gruesa puede convertir en un desastre tu plato. Un filete para empanar debe ser necesariamente fino para que se haga bien durante la fritura ya que si carne queda poco hecha, soltará jugos que empaparan el empanado y harán un plato poco agradable.
Otro truco que debes tener en cuenta para esta elaboración es que antes de proceder a empanar, los filetes deben estar especialmente limpios de todo tipo de piel, grasa, nervios y huesos. Para que no se arruguen durante la fritura, conviene hacerles unos pequeños cortes a lo largo de sus laterales. Ten en cuenta que el fuego no impactará directamente en la carne, lo hará en el empanado, así que debe estar lo más pulcra posible.
El marinado del filete

El sabor de los filetes empanados no se limita al juego de las harinas y también tendrás un buen lugar para experimentar en la propia carne. Si las marinas la carne, ave o pescado con la que harás tu filete empanado durante un tiempo antes de empanarlas el resultado final podría cambiar considerablemente. Su textura también cambiará y se volverá más tierna y jugosa.
Esta es una técnica muy sencilla de aplicar en tu propia cocina aunque te suene muy profesional en primera instancia. Basta con sumergir los filetes en leche, en salsa de soja, en una mezcla de limón, mostaza y miel o, simplemente y en seco, en una mezcla de hierbas y especias. Busca la fórmula que más encaje con tu paladar para encontrar la receta del filete empanado perfecto con el marinado.
El aceite de oliva

El aceite de oliva es la mejor opción para una fritura por mucho que tengamos cientos de opciones actualmente a nuestra disposición. Este tipo de aceite propio de nuestra gastronomía resiste mucho mejor las altas temperaturas sin que sus propiedades organolépticas se vean afectadas.
Además, este ingrediente otorgará un agradable sabor a la carne, incomparable con el de otros productos. Como en todas las recetas de frituras, el aceite debe estar muy caliente antes de freír, pero no humeante. Fríe los filetes por tandas para un resultado mejor, de esta forma evitarás que baje la temperatura del aceite bruscamente y la fritura será perfecta. Termina escurriendo sobre un papel absorbente para que no quede un plato grasiento.