Tras más de 3 años desde su último proyecto, Malú está de vuelta. A la emoción de su nuevo disco Mil Batallas hay que sumarle su nueva faceta y la más personal: su maternidad. La cantante se encuentra muy emocionada e ilusionada tras el lanzamiento de su álbum y ha hecho balance de su carrera y la nueva etapa como madre que está viviendo. Una Malú nunca vista hasta ahora.
Te contamos como está compaginando la cantante su maternidad y este nuevo proyecto.
Malú: «No voy a consentir, ni permitir perderme absolutamente nada de mi hija «
> Es el primer proyecto musical en el que Malú tendrá que compaginar su faceta como madre. La sobrina de Paco de Lucía nos muestra una faceta que nunca habíamos visto de ella hasta ahora.
A pesar de ser muy reacia a hablar de su vida privada, Malú no deja de deshacerse en elogios sobre su hija y cada vez que habla de ella se nota la emoción en su rostro. Confiesa que compaginar su trabajo y su familia es muy complicado y que se está adaptando «al final conciliar es difícil».
«Me voy dando cuenta que sacarle muchas más horas al día de las que realmente tiene para poder estar en todo a la vez y luego también ellos te motivan y te inspiran». Malú es clara sobre su hija: «no voy a consentir, ni permitir perderme absolutamente nada de mi hija y encima soy muy pesada, estoy encima de absolutamente todo, pero a la vez también estoy absolutamente de todo mi trabajo»
Y aunque se le haga difícil compaginar todo «tú estás dejando de dormir o estás dejando de hacer cosas por estar con el ser más inspirador, maravilloso y el amor más puro que hay en el mundo entonces te compensa».
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Lucía, la debilidad de Malú
> La coach de la Voz nos está enseñando su faceta más dulce y tierna y reconoce que ser madre le ha cambiado la vida: «Yo creo que al final a todas las madres y familias les cambia la vida.» Reconoce que a partir de ahora todo lo demás es secundario y «el mundo ya pasa a ser tu hija y por encima de eso ya no hay nada, ya todo lo demás está por debajo incluida tú. También yo creo que eso te quita mucha tontería de sopetón, es como olvídate un poco ya de ti porque se acabó. Ya todo es tu hija«.
No cabe duda de que la pequeña Lucía es la debilidad de la artista. El llegar a casa y estar con su hija le hace quitarse su máscara más dura y distante y le pone los pies en el suelo: «El reencontrarme otra vez con la que está en casa y que sea la protagonista, el reencontrarme otra vez con esa niña más tímida, más vulnerable y reencontrarme con ella, agarrarla de la mano y que protagonice ella y no la fuerte y la segura que era a la que puse por delante en cierto modo, ¿no? El poder disfrutar de las cosas y el poder disfrutar el cada día de mi trabajo, de los escenarios y de la vida».
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Mil Batallas su declaración de amor
> Su maternidad no ha sido lo único que le ha mantenido separada de los escenarios. Hace tres años una lesión le obligó a bajarse de los escenarios de sopetón y le ha hecho volver con más ganas que nunca.
¿Plasmará en sus canciones su amor hacía Albert Rivera? Y es que la relación de Malú con el ex-líder político es un Secreto a voces, como confesaba en uno de los primeros adelantos de este disco. Para Malú «Mil batallas es ese lugar donde me he quedado nueva, donde hay gritos de libertad, gritos de empoderamiento, gritos de paz, donde te puedes encontrar toda mi alma. Toda mi alma reflejada en letras y músicas«.
Reconoce que la pandemia y su lesión «me hace quitarme un poco del medio, me hace irme de una gira que era mi vida y que hice con una ilusión y unas ganas increíbles y quizás algo que no hubiera hecho en mi vida que fue parar después de veintitantos años sin parar de girar, sin parar de sacar discos, de trabajar, de una cosa detrás de otra, me he podido tomar ese tiempo y es donde realmente me doy cuenta que había una batalla que es la más dañina y a su vez la más absurda.«
Y es que confiesa que esta batalla «era conmigo misma en todo ese tiempo, era ese exceso de exigencia, ese control absoluto de todo que hacía que no pudiera disfrutar de todas las cosas maravillosas que me estaban pasando«.