Anabel Pantoja está en un momento dulce. Por primera vez en mucho tiempo, su vida sentimental y la laboral están en sintonía. Sin embargo, las críticas acompañan a la colaboradora, ya que muchos espectadores no comparten su comportamiento de los últimos meses. Consideran que la influencer tiene una actitud altiva y que no es una buena profesional en ocasiones. Unas acusaciones que han vuelto a repetirse tras su última intervención.
El papel de Anabel Pantoja en ‘TardeAR’
En el programa ‘TardeAR’, Anabel Pantoja viaja por todo el mundo viviendo y reaccionando a experiencias únicas. En las últimas semanas, ha puesto rumbo a Estados Unidos para enfrentarse a retos muy variados. Aunque en repetidos programas se ha dejado ver muy enfadada, con el equipo de Ana Rosa Quintana ha mostrado por primera vez su fuerte carácter: “No me pagan para esto, no puedo más” fueron las palabras de la sobrina de Isabel Pantoja con un gran disgusto.

Anabel Pantoja no estaba dispuesta a asumir el reto que el programa le había propuesto. La influencer mantenía que ella no quería ser actriz y que no tenía ningún motivo para hacer esa prueba: “Que no, que no, esto no es vida, hasta aquí”, se plantaba. En el tiempo que ha estado en Hollywood, ha tenido momentos de todo tipo y ha dejado ver su verdadera cara, generando todo tipo de reacciones en las redes sociales.
La emoción de Anabel Pantoja en su viaje a Estados Unidos
En un primer momento, Anabel Pantoja se emocionó mucho al ver la casa de Michael Jackson. La colaboradora hizo una de las conocidas rutas que va pasando por las mansiones de las personas más famosas de la zona. Con este recorrido, pudo disfrutar desde la distancia del hogar de Brad Pitt y Jennifer Aniston, entre otras. Sin lugar a dudas, la que más le impactó fue la del rey del pop. Se trata de una impresionante vivienda, de siete dormitorios y 13 baños. El cantante vivió y murió en ese domicilio, que en 2012 fue vendida por 14 millones de euros. Un recuerdo con el que la influencer ha llegado a las lágrimas.

Anabel Pantoja ha empatizado mucho con la historia de Michael Jackson, hasta el punto de emocionarse recorriendo el exterior de la casa. La influencer explicaba entre lágrimas: “Aquí vivió sus últimos días. Yo no podría vivir aquí. Pobrecito. A mí me daba mucha pena que él pasara aquí sus últimos días. Que Dios le tenga en su gloria y esté descansando”. La joven se ha santiguado antes de continuar su ruta, desconsolada. No se imaginaba que lo peor de su reto de esa semana todavía estaba por llegar.
Anabel Pantoja se enfada de forma exagerada
Al enterarse de que tenía que hacer una caminata de dos horas para llegar al famoso letrero de Hollywood, Anabel Pantoja se ha enfadado muchísimo. El equipo del programa de ‘TardeAR’ le ha mandado ponerse ropa de deporte para empezar la prueba, mientras la joven mantenía sus quejas: “Yo lo intento pero tío, es que tengo ganas ahora mismo de llorar”. La influencer ha intentado convencer al equipo para evitar este reto: “Yo no voy a subir hasta arriba, me parece precioso, pero no. Bueno, que no quede porque no lo intento, pero vamos, que no he venido para hacer una triatlón”, repetía.

Con una actitud de diva, Anabel Pantoja ha asegurado que no iba a cumplir lo que el programa le había dicho: “No voy a subir dos horas cuesta arriba. Que hay serpientes. No, yo no voy a morir aquí en Hollywood por una serpiente. Es que a mí no me pagan para esto. No hay ceros para pagar esto. Qué necesidad. No me puede pasar nada peor en mi vida”. Una actitud, haciendo referencia al dinero, que ha recordado a la de su tía. Isabel Pantoja recordaba en sus últimas intervenciones públicas que no había ceros en la cuenta que pudieran pagar una entrevista de ella en televisión.
La actitud de diva de Anabel Pantoja genera críticas
La audiencia no ha entendido que Anabel Pantoja reaccione así, cuando el objetivo de su sección en ‘TardeAR’ es que cumpla retos sorprendentes. La influencer mantenía que su contrato con el espacio no hacía referencia a este tipo de actividades: “Que no puedo más, que estoy agobiada, que no puedo más. Que esto no estaba en el contrato. Que yo no quiero ser actriz, que yo quiero ser influencer. Yo no voy a subir al cartel porque el cartel se ve desde Sevilla”, era su argumentación en una mezcla entre lágrimas y enfado.

Desde que se incorporó a ‘TardeAR’, Anabel Pantoja ha mostrado todas sus emociones. La audiencia está conociendo todas las versiones de la colaboradora a través de sus viajes y retos. Uno de los últimos fue a Las Vegas y los espectadores vieron una emotiva conversación entre ella y su novio, que demuestra cómo es su vínculo en realidad. La joven aseguraba que se había despertado de bajón porque quería que David estuviera con ella: “Es muy bonito, gordi, quiero que vengamos juntos a Las Vegas. Yo me quiero montar en una góndola, llevo sin montarme desde que tenía 18 años”. Para la influencer era un viaje muy romántico y esperaba poder hacerlo con su pareja dentro de poco tiempo.