Los ojos están puestos en la sobrina mayor del rey Felipe VI. La preocupación por Victoria Federica es máxima y la infanta Elena está destrozada, en vilo por su hija. ¿Quieres saber qué ha pasado y a qué se debe tanto alboroto? Sigue leyendo, te lo contamos todo a continuación.
Cuarentena por separado
> La infanta Elena está pasando en la más absoluta soledad estos días de confinamiento que por fin parecen llegar a su fin. Antes de que se decretara el estado de alarma, sus hijos se marcharon a Andalucía para guardar la cuarentena en casa de sus amigos. Mientras Victoria Federica está con su novio y con otros colegas en Jaén, Felipe Juan Froilán escogió la finca de un íntimo en Marbella para encerrarse. Algunas familias han aprovechado esta situación para hacer piña y pasar juntos más tiempo, pero los de Marichalar y Borbón han preferido tomar caminos separados.
Salvo su paradero, pocos detalles más conocíamos acerca de cómo estaban pasando la infanta Elena y sus hijos este confinamiento impuesto a raíz de la crisis del coronavirus. En las últimas horas, se ha generalizado la preocupación por Victoria Federica, que ha puesto a todo el mundo en alerta tras publicar un enigmático mensaje. ¿Qué le pasa a la benjamina de Marichalar? Su madre está en vilo por esta situación, sigue leyendo para entrar en detalles.
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Máxima preocupación por Victoria Federica
> A sabiendas de la discreción que siempre se exige desde Zarzuela, la hermana de Froilán mantiene privadas sus redes sociales y solo pueden ver el contenido que publica aquellos a los que da permiso expreso. Aun así, la joven no es muy activa en sus perfiles y se muestra muy selectiva con todo lo que comparte con sus seguidores. Por este motivo, sorprende, y mucho, que haya hecho público el alarmante mensaje que pueden leer sobre estas líneas.
«Cuando se es joven y saludable, no se le ocurre a usted que en un solo segundo toda su vida podría cambiar…», señaló Victoria Federica en su cuenta de Instagram. ¿Qué le pasa a la benjamina de la infanta Elena? Jamás hemos visto a la joven en esta faceta tan reflexiva y melancólica, seguramente potenciada por la crisis del COVID-19. Sea lo que sea, esperemos que se recupere más pronto que tarde.
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La infanta Elena, en vilo por su hija
> Siguiendo siempre las recomendaciones de las autoridades para poner freno a la propagación del coronavirus, la duquesa de Lugo sale cada día a pasear a su perro y, de paso, a disfrutar de un poco de aire fresco. En su caminata, la infanta Elena suele atender amablemente a los medios y, aunque dedica pocas palabras, su testimonio es más que revelador. La última vez reconoció que, como cualquier otra madre, lleva con cierta preocupación que sus dos hijos estén pasando el confinamiento lejos de ella.
Su sentimiento de angustia será mayor ahora que se ha dado a conocer el preocupante mensaje que publicó Victoria Federica en sus redes sociales y que puso en alerta a toda la familia. Lo cierto es que la joven acostumbra a ser el centro de atención, aunque no siempre por los motivos que gustarían en Zarzuela. El comportamiento de la benjamina de Marichalar trae de cabeza a Casa Real, que ya ha dado unos cuantos toques de atención a su madre.
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El tirón de orejas a la infanta Elena por culpa de Victoria Federica
La mayor de las primas de la princesa Leonor y la infanta Sofía acostumbra a llevar una vida social y sentimental muy intensas. Antes del confinamiento, no había sarao que Victoria Federica se perdiera y esta sobreexposición mediática empezó a incomodar a Casa Real. Así, desde Zarzuela se pusieron en contacto con la infanta Elena y le dieron un buen tirón de orejas, animándola a que vigilara de cerca la actitud de su hija.
La infanta Elena es la primera que sabe que Victoria Federica necesita un poco de mano dura, pero no pasa por que nadie le diga cómo ha de educar a su hija. Así, según apuntan desde Periodista Digital, la duquesa de Lugo hizo llegar a su hermano, el rey Felipe VI, su descontento por el requerimiento que le llegó desde Palacio, y ambos se enzarzaron en una tremenda discusión. Al parecer, se trató de una «conversación muy subida de tono» en la que también salió a relucir el nombre de Letizia.
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