Sálvame es la máquina perfecta para hacer dinero. De eso no hay duda. Eso sí, la presión y la sobreexposición a las críticas va en el sueldo. El programa de Telecinco es líder de audiencia durante toda la semana. Cotilleo.es ha tenido acceso a los cachés de algunos de sus colaboradores. La cosa no tiene desperdicio. Sigue leyendo.
Kiko Hernández, el intocable
> Kiko Hernández es uno de los rostros habituales de Sálvame. Su vida privada no es objeto de comentarios porque prima la gran cantidad de información que aporta. Sin duda, se ha hecho con el programa y maneja muy bien los tiempos. Sabe cuándo tirar a dar y también cuando toca bajar la intensidad. Es el azote de muchos de sus compañeros.
Por cada aparición en Sálvame, Kiko cobra 1.400 euros. Es el mejor pagado de los colaboradores y el más valorado por la cúpula A esto hay que sumar sus intervenciones en el Deluxe, que se han reducido desde que nacieran sus hijas. Entre unas cosas y otras, Hernández se lleva al año unos 250.000 euros.
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Belén Esteban: la gallina con los huevos de oro
> Belén Esteban ha sido uno de los personajes que más dinero ha ganado en televisión. Hace años se publicó que solo de la televisión ingresaba 100.000 euros anuales. A esto había que sumar las distintas acciones que realizaba como imagen. Llegó a tener su propia línea de menaje del hogar, cuyo producto estrella eran las sartenes, y también ganaba bastante por las exclusivas.
A la de Paracuellos se le ha acabado el maná por obra y gracia de su hija, que no quiere que la mencione en televisión ni que tampoco hable de su padre. Todo esto ha hecho que su estrella televisiva cotice a la baja. En el Deluxe ya no es primera silla y ha quedado relegada a la media noche. Aun así, en Sálvame está bien pagada, 1.100 euros por programa.
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El carácter hecho Mila
> Sálvame no tendría sentido sin Milagros Ximénez de Cisneros. La colaboradora se mueve como pez en el agua y su vehemencia es ya imprescindible. En alguna ocasión se ha dicho que algunos de sus compañeros le tienen miedo. Sino miedo, respeto. Y es que Mila cuando se pone en modo sin filtro es peligrosa. Algunos de sus compañeros lo saben y por eso miran de ponerse a salvo cuando estalla el huracán ni Mila, ni Mili, ni Milo.
Por programa, Mila se lleva 1.000 euros. A esto hay que sumar su colaboración en el Deluxe, mejor pagada por la franja horaria en que se emite. Los negocios se le resisten a la colaboradora. Aunque su línea de cremas tuvo muy buena acogida, no acabó de despegar. Mila colabora semanalmente en Lecturas y también realiza exclusivas en la misma revista. Si pudiera, dejaría el programa por el alto coste emocional que le representa. Y es que no sale gratis ser la mala de la película. Nada que ver su personaje con la realidad, pura sensibilidad.
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Lydia Lozano, el blanco fácil
> Lydia Lozano es la colaboradora que más lágrimas ha vertido en Sálvame. Para algunos, la rubia ha sido el pim, pam, pum que les ha dado muchos minutos de gloria. Se la critica porque le gusta salir en pantalla. Sin duda, toda una ventaja para alguien que trabaja en televisión. En ocasiones, se muestra retraída debido a los ataques que recibe.
La rubia es presencia indiscutible en Sálvame y en el Deluxe. En ambos programas ha protagonizado momentos que se han convertido en historia de la televisión. Si algo no soporta es que se metan con su marido. Hace años que Supervivientes quiere contar con ella para la aventura pero ella se resiste porque lo suyo es el asfalto. Cada aparición en Sálvame le reporta 950 euros.
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