Bertín Osborne vuelve a estar señalado por la justicia. Además de ser un cantante y presentador de éxito, también se decantó por crear algunos negocios empresariales que rara vez le han salido bien. Su faceta como empresario le ha llevado a crear su propia franquicia. El auge de este tipo de modelos empresariales y los suculentos beneficios que parecen generar llevaron a Bertín a lanzarse a la piscina.
Cuando uno no está del todo preparado para emprender un negocio desconocido es mejor no hacerlo. Bertín tenía en ‘El rincón de Bertín’ una manera de darse a conocer en el mundo de las tapas y de las cañas low-cost. Un sector con una enrome competencia que al parecer ha acabado con las esperanzas de ganar dinero del artista. Sus franquiciados exigen una compensación económica por los puntos del contrato que se han incumplido de forma reiterada hasta la fecha.
‘El rincón de Bertín’
La última aventura empresarial de Bertín Osborne no ha salido tal y como esperaba el artista. Al parecer y según afirma ‘Economía digital’ sus franquiciados están planeando demandarle para pedirle una compensación económica importante. Muchas personas adquirieron esta franquicia al saber quién estaba detrás.
Bertín Osborne es una cara conocida que puede atraer clientes a un sector como el de la restauración. En locales en los que se sirven tapas y comida mediterránea a buen precio, con el sello de un cantante famoso, nada parece poder salir mal. Pero, sin embargo, una serie de irregularidades continuadas a lo largo del tiempo han hecho saltar todas las alarmas.
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Incumplimientos reiterados
Los afectados por sumarse a la idea empresarial de Bertín Osborne tienen además buenas cartas en sus manos. El verano pasado se descubrió que la franquicia ‘El rincón de Bertín’ no estaba inscrita en el registro nacional de franquicias. Un error muy grave, ya que el negocio del presentador estaba operando de esta manera.
Los franquiciados han realizado una inversión importante de la que solo han obtenido perdidas. Una persona que se hace con las riendas de este tipo de locales, debe pagar las cuotas exigidas por la franquicia, junto a adquirirle todo el material a la empresa para servir las consumiciones, desde las botellas de agua hasta los vinos. El responsable debe proporcionarles la marca y la publicidad exigida.
Les dejó en la estacada
A todos aquellos empresarios que confiaron en Bertín Osborne para apoyar sus negocios les dejó en la estacada. No son buenos tiempos para un sector de la restauración afectado directamente por la crisis. El trabajo por cuenta propia es una realidad a la que muchos se aferran.
La web del negocio es realmente esperanzadora. Con un espíritu de mantener la esencia de las tradicionales tabernas madrileñas que se funden con una innovación culinaria importante, nacen estos locales. La realidad es que no se ha hecho ninguna publicidad, ni se ha prestado ningún servicio desde la franquicia.
Las deudas con hacienda
No es la primera vez que Bertín Osborne se enfrenta a problemas con la ley. En 2003 se sentó en el banquillo de los acusados por problemas con hacienda. Todo negocio debe cumplir una serie de pagos y obligaciones fiscales y el no cumplió con lo establecido. Una mayor facturación siempre representa un aumento de las tasas a pagar, algo que no tuvo en cuenta.
Para evitar problemas más graves, Bertín recurrió al alzamiento de bienes, esperando proteger su patrimonio. En aquella ocasión fue condenado a pagar 900.000 euros a Hacienda. Además le impusieron una pena de un año de cárcel, pero no entró en prisión por tratarse de su primer primer delito de estas características.
El IRPF se paga
Las actividades artísticas de Bertín Osborne estuvieron al margen del IRPF durante algunos años. Teniendo en cuenta que fueron los de su mayor esplendor como cantante el ahorro que realizó Bertín por no contribuir a las arcas del estado fue considerable. En el momento en que se le requirieron los pagos Osborne intentó hacer lo posible para no pagar al fisco.
Cambió de nombre todas las propiedades en España y declaró que no tenía recursos en este país. Una manera de intentar evadir impuestos, pero no terminó de salirle del todo bien. Las artimañas del artista las conoce muy bien Hacienda, que está atenta a todas las idas y venidas de este tipo de personajes.
Canterbury Operations, SA
Detrás de este nombre de ciudad de Inglaterra, Canterbury Operations, SA se escondía una de las sociedades de Bertín Osborne. El objetivo principal de este entramado era canalizar honorarios artísticos y bienes para evitar cualquier embargo producido por la Agencia Tributaria.
Simuló un contrato en el que cedía sus derechos de la propiedad intelectual, artística y de imagen a cambio de la empresa asumiera una deuda de 1.340.000 dólares. De esta manera creía poder evitar cualquier incidente con Hacienda. Aunque no le sirvió para escaparse de un nuevo juicio.
Se trasladó a Miami
En el momento en que Hacienda apretó todavía más al cantante, este traslado su residencia a Miami. De esta manera conseguía evitar pagar las deudas contraídas con el fisco español. Según él todos sus ingresos llegan a través de su sociedad Canterbury Operations S.A.
Afirmó que en España no tenía ninguna propiedad después de un litigio con el acalde Pedro Pacheco, durante el cual llegaron a enfrentarse públicamente ambos. El artista demandó al alcalde por desacato, convirtiéndose en uno de los frentes abiertos que avivó la polémica de Bertín Osborne durante los años 90.
En la cartera de Bertín
Toda esta serie de problemas financieros parece no tener fin. Algo que es extraño si tenemos en cuenta todo lo que gana Bertín Obsborne. Después de su éxito en TVE, muchos querían contar con sus servicios como presentador. El que acabó llevándoselo, fue Vasile que le ofreció 250.000 euros para poder tenerlo entre sus filas. La cadena contaría desde entonces con el polifacético Bertín para animar sus noches.
De esta cantidad desorbitada, 30.000 euros van directamente a manos de Bertín en cada una de las entrevistas que realiza. Eso significa que a final de mes le llega una nómina de 120.000 euros. Una cantidad que la mayoría de mortales tardarán unos 10 años para conseguirla. No se puede entender tantos problemas con la ley para alguien con un sueldo tan elevado.