María Patiño, Kiko Hernández o Jorge Javier Vázquez entre otros se han convertido en unos de los rostros más conocidos de la televisión gracias al espacio vespertino de Telecinco. Su éxito resulta innegable, pero detrás de todos esos focos y luces se esconden unas cuantas sombras que Cotilleo.es sacará a relucir. Sigue leyendo para enterarte de todo.
El pasado de Kiko Hernández
> Hace tiempo, la dirección de Sálvame consideró que sería buena idea que los colaboradores jugaran al ‘Yo nunca’ para que ellos mismos confesaran sus trapos sucios del pasado. En esta versión, los tertulianos tendrían que levantarse en lugar de beber cuando alguien dijera algo que habían hecho, y el juego empezó fuerte con la siguiente prueba: “Yo nunca he pagado por mantener relaciones íntimas”, pronunció la voz en off del programa.
Aunque Kiko Hernández no se levantó porque no tenía ganas, confesó que si había recurrido a la prostitución. “He pagado, fue en Castellón”, sentenció. El colaborador explicó que hacía mucho tiempo que no volvería a hacerlo, además, más tarde recalcó que, realmente, el no pagó, sino que fue un “buen amigo” quien abonó el precio, aunque reconoce que disfrutó “mucho”.
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“Me agarré con ansia a la cocaína”
> Recientemente, Karmele Marchante levantó una tremenda polémica tras asegurar en su cuenta de Twitter que en Sálvame había “carreras de droga en los camerinos”, dejando caer que este tipo de sustancias están a la orden del día. De hecho, algunos colaboradores han confesado por su cuenta que han experimentado con los estupefacientes en algún momento de su vida, coincidiendo con su etapa en el programa, como es el caso de Belén Esteban. El presentador, Jorge Javier Vázquez, en cambio, reveló que probó la cocaína en su juventud, cuando todavía no era el conductor de uno de los espacios más exitosos de la televisión.
“Corría la coca, droga que yo había consumido de manera esporádica, pero a la que me agarré con ansia porque necesitaba tralla. Viví al borde del abismo. Un miércoles acabé tan pasado en un local que a las siete de la mañana del día siguiente me vi desnudo en una sucia casa del centro rodeado de otras seis personas, tan pasadas y desnudas como yo. Bebíamos, nos metíamos y nos toqueteábamos. Cruces de lenguas, lametones en los sexos, mordiscos en los pezones, penetraciones, GHB, ketamina, poppers, porros, lo que apareciera”, publicó Jorge Javier Vázquez en Último verano de juventud, uno de sus libros autobiográficos.
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La extraña filia de una colaboradora
> Como hemos podido comprobar anteriormente, los tertulianos de Sálvame no tienen reparo alguno a la hora de hablar abiertamente sobre sus intimidades y aspectos más privados de su vida. Así, María Patiño tampoco tuvo muchos pelos en la lengua cuando reveló una de sus filias sexuales más extrañas: le gusta lamer los pies. Todo el mundo se quedó atónito en el plató cuando la periodista compartió semejante secreto, y algunos no entendían como podía gustarle eso “con lo escrupulosa que eres”.
Patiño lo aclaró así: “Pero eso de comida normal, yo de lo otro como de todo porque no soy nada escrupulosa. Pero no a cualquiera. No voy chupando por ahí los pies de la gente”. Así de rotunda dejó claro que se reserva esta filia para alguien que le genere mucha confianza y, en este caso, imaginamos que se trata de su marido, Ricardo Rodríguez, con quien se casó en secreto el verano pasado.
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Una masturbación en público
> Aunque también fue colaboradora de Sálvame durante mucho tiempo, las confesiones sexuales de Rosa Benito llegaron en otro programa. La cuñada de Rocío Jurado compartió velada con Loles León, Belinda Washington e Irma Soriano en Ven a cenar conmigo: Gourmet Edition, y se abrió con ellas como nunca antes lo había hecho. Las cuatro empezaron a hablar de las relaciones íntimas con tanta naturalidad que parecían cuatro amigas tomando café. Fue entonces cuando la tertuliana de Ya es mediodía confesó que había masturbado a su exmarido Amador Mohedano a bordo de un avión.
¡Qué fuerte! ¿Sería en el baño o la misma butaca de la nave? Ese secreto se lo reservó para ella, pero entre esto, las orgías de Jorge Javier, la filia de María Patiño y la confesión de Kiko Hernández, queda claro que algunos colaboradores de Sálvame no tienen reparos a la hora de desatar su pasión.
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