Maite Galdeano vuelve a la super exposición mediática que tanto le gusta. La madre más famosa de la televisión – con permiso de Belén Esteban e Isabel Pantoja – vuelve a confirmar su participación en un reality de Mediaset, que se ha convertido ya en su hogar. Así, tal y como confirma la cadena, Maite será la nueva concursante de Sola a partir del 14 de diciembre, donde es probable que pase la Navidad enfrentándose a sí misma y sus miedos. si te gusta el plan, puedes seguirlo en Mitele Plus. Si no te gusta, tendrás que «soportarlo» pues a buen seguro la navarra aparecerá en casi todos los programas de la cadena como acostumbra a hacer desde que la conocimos en Gran Hermano 16.
Su vida antes de Gran Hermano

Lo cierto es que antes de su participación, y la de su hija, en Gran Hermano 16, Maite Galdeano era una persona normal. Con una vida bastante dura a sus espaldas, víctima de violencia doméstica y haciendo sacado a dos hijos adelante con mucho esfuerzo, Maite gozaba de cierta estabilidad emocional y laboral. Era conductora de autobús en la línea 16 en Pamplona. Ese es el contexto en el que entraba, junto a su hija en el famoso reality de Guadalix de la Sierra, que le cambiaría la vida, y el rostro, pues como podemos ver en la imagen, aquella Maite no se parece mucho a la que conocemos en la actualidad.
Gran Hermano 16

Maite Galdeano entró en Gran Hermano 16 junto a su hija Sofía Suescun. Lo curioso es que mientras como todos sabemos, Sofía ganó el reality, Maite fue la primera expulsada con más del 50% de los votos. Sin embargo, esto no truncó la «carrera televisiva» de la navarra, sino todo lo contrario. Comenzó a frecuentar los platós de Mediaset para defender a su hija, convirtiéndose en una de las protagonistas indiscutibles de la edición, a pesar de estar fuera de la casa.
Sus primeras intervenciones estéticas

A medida que iba subiendo su popularidad y sus polémicas, Maite Galdeano iba perfilando el que sería su nuevo rostro. Entre Sálvames y polígrafos, la madre de Sofía comenzaba un plan de intervención estética en su rostro. No parece extraño considerando que hace años que vive de sus apariciones televisivas. Se ha puesto bótox, se ha hechos varios lifting, aumento de labios. En la mayoría de los casos además, sus intervenciones han sido retransmitidas a bombo y platillo en los medios, por lo que está claro que además le salen gratis.
Toda una influencer

Como decimos, la popularidad de Maite Galdeano no ha dejado de crecer en los últimos años. Todo lo contrario. La madre de Sofía Suescun se ha ido sumando a todas y cada una de las polémicas que le afectan directa e indirectamente. Además, ha participado en otro reality con su otro hijo, Cristian, por lo que no ha dejado nunca de estar en el foco mediático. Esto, genera interés no solo para los medios de comunicación dedicados a este nicho, sino también para algunas marcas que ya la consideran toda una «influencer» como a su popular hija. Esto conlleva a que los productos de belleza o los retoques, le salgan gratis en muchas ocasiones. Por eso, parece que Maite se ha hecho adicta a la medicina estética, porque no ha parado. El año pasado sin ir más lejos se sometió a una blefaroplastia, para reducir la piel sobrante de los ojos y las bolsas.
Actualidad

Resulta evidente que Maite Galdeano ha cambiado mucho desde que la conocimos y era una ciudadana anónima, a este momento en el que se encuentra a las puertas de participar en otro reality. La navarra es muy presumida y le gusta hacer deporte y comer bien para mantenerse saludable. Sin embargo, esto no le parece suficiente, y no duda en pasar por el quirófano para mejorar su aspecto cada vez que lo considera necesario. Esta claro que se ve formidable, pero ¿se ha marcado algún limite o se dejará llevar por los exigentes cánones de belleza que marca la televisión?