Mario Casas vive hoy uno de sus mejores momentos tanto a nivel personal como profesional. En el terreno amoroso vive feliz pese a llevar una relación a distancia, en el trabajo atraviesa una época dorada. Tanto es así, que hace tan solo unos días subía al escenario del Teatro Coliseum para alzarse con el Premio Feroz como mejor actor protagonista. Su discurso, que recordó a un grande entre los grandes del mundo del cine de este país recientemente fallecido, Quique San Francisco, impresionó a todos. No solo por la bonita dedicatoria que lanzó a este buen amigo suyo sino porque su actitud al recoger el galardón fue muy diferente a la que nos tiene acostumbrados. ¿Quieres saber por qué decimos esto? Pues sigue leyendo porque nuestras apuestas van en una sola dirección, y te van a dejar, como poco, con la boca abierta.
Premio Feroz como mejor actor protagonista con sorpresa incluida
> No sabemos si fueron los nervios o unas copas de más pero el estado en el que Mario Casas recogía su tercer Premio Feroz era como poco, algo extraño. Subió al escenario para recoger el trofeo que le acreditaba como mejor actor protagonista por la película No matarás sin pena ni gloria. Como quien no quiere la cosa. Como fuera de sí mismo. Andaba con una parsimonia no propia de un momento como aquel en el que la alegría debía derrocharse y salir por todos los poros de su piel. Un discurso escueto, ciertamente improvisado y una voz baja, sin entereza y bastante entrecortada conformaron el resto del guion que esa noche recitó.
«Muchas gracias aunque estoy un poco nervioso. Los críticos y la gente especializada en el cine lleváis apoyándome desde años atrás, lo que me ha hecho seguir trabajando y esforzándome día a día. Quiero compartir esto con todo el equipo de la película. Los actores somos la cara visible, pero detrás hay unos técnicos maravillosos, unos guionistas… que, al final, estos premios son gracias a ellos». Unas palabras que no ilusionaron a ninguno de los asistentes y que los espectadores estamos demasiado acostumbrados a oír. La segunda parte, consiguió dejar atrás a la primera y es que quiso homenajear a alguien muy querido entre el público.
Siguiente: Su homenaje más sentido sobre el escenario a uno de los grandes
Su particular homenaje a Quique San Francisco
> Estados de posible embriaguez a parte, Mario Casas no perdió la oportunidad de despedir y homenajear a un gran amigo suyo que falleció hace pocos días, Enrique San Francisco. «Me gustaría compartir este Feroz con alguien que se fue ayer«, comenzó a decir. «Un actor que he seguido desde hace muchísimos años y que pude conocer durante un ratito, pero que me dejó huella. Es Quique San Francisco«, todos los asistentes se levantaron de sus asientos para aplaudir sus palabras y mostrar su cariño y pesar a esta gran figura con la que todos hemos crecido.
«Todos los que hemos coincidido con él sabemos que era alguien especial. Era alguien con mucho talento y nos ha dejado huella a muchos, así que se lo dedico a él y a toda su familia«, ha pronunciado mientras alzaba su ansiado premio como mejor actor protagonista y a la vez se dirigía a bajar del escenario y abandonar el atril dando paso al siguiente. Quique, un ser muy querido se fue el pasado 1 de marzo a los 65 años a causa de una neumonía bilateral severa. El mundo del cine y de los artistas lloran su pérdida. Lolita, Pablo Motos, María Barranco o Pipi Estrada entre muchos otros acudieron a despedirle en el tanatorio de Madrid donde se le ha velado con una cerveza en la mano, tal y como a él le hubiera gustado.
Siguiente: En su mejor momento profesional
Camino a los Goyas ve los galardones como algo secundario: «Prefiero trabajo a premios»
> Inmerso en su nuevo proyecto, una miniserie que se estrenará en Netflix el próximo 30 de abril bajo el título de El Inocente y con un elenco de actores de renombre en el que destacan José Coronado, Aura Garrido o Alexandra Jiménez, puede decir que disfruta de su época más dulce a nivel profesional en el mundo de la interpretación de alto nivel. Su protagonista, en este caso Mateo, a quien da vida Mario Casas, asesinó por accidente a una persona hace nueve años durante una pelea por lo que intenta reconducir su vida con su mujer aunque una llamada misteriosa rompe todos sus esquemas.
Después de otros films como A contracorriente, El fotógrafo de Mathausen o Adiós, muchos se preguntan cómo está llevando la noticia sobre su primera nominación a los próximos Premios Goya 2021 por su papel en No matarás. En una entrevista a la Agencia EFE ha declarado que está muy agradecido a los académicos pero que sin embargo, los premios no lo son todo en esta vida. «Al final, los premios son algo secundario. Creo que para todos nosotros, si hablas con cualquier actor y pones en una balanza premios o trabajo, cualquiera prefiere trabajo, cien por cien», ha llegado a decir. Aún así el trabajo y los premios van siempre de la mano, como ha podido comprobar y más ahora.
Siguiente: Hasta las trancas de Deborah François: «Mi corazón late fuerte»
Enamoradísimo de su novia Deborah François
> El actor mantiene una relación a distancia con la también actriz de origen belga Deborah François. Está enamoradísimo, y así lo demuestra cuando las cámaras están delante. «Estoy maravillosamente bien. Mi corazón está latiendo fuerte», asegura en tono risueño cuando recuerda a su chica con la que ya lleva un año. Deborah, que por su profesión vive a caballo entre Francia y España
Se conocieron en el rodaje de la película de Netflix que él mismo Mario Casas protagoniza El practicante y su posición acerca de las relaciones a distancia está clara, haría lo que fuera por ella. «Es fácil. Solo hay que dejarse llevar«, afirma dejando claro que por fin ha encontrado a su media naranja y que lo suyo va completamente en serio.