Kiko Rivera se encuentra de nuevo en el punto de mira. Y ya no solo por la demoledora exclusiva en la que ha repartido estopa tanto a su prima, Anabel Pantoja como a su hermana, Isa Pi. Sino porque los rumores de infidelidad hacia Irene Rosales vuelven una ve más a la primera plana. Escapando de la expectación mediática que ha generado su entrevista en Lecturas, Kiko Rivera ponía rumbo a Matalascañas (Huelva) para, según él, componer nuevos temazos… Pero en esta escapada, los ojos indiscretos de los testigos aseguran que estuvo muy bien acompañado. Unos rumores de infidelidad que, sorprendentemente, estarían ligados con el motivo por el que tanto él como Irene Rosales se mudaron de domicilio. ¿Qué tiene que ver una cosa con la otra? En Cotilleo.es te contamos la curiosa conexión…
4Patiño: «La obsesión, entre comillas, de Irene es tener por fin tener una propiedad a su nombre»
> Al parecer, la casa de Castilleja de la Cuesta a la que se han mudado es de alquiler… Pero con opción a compra. «A mi lo que me contaban es que la casa era de alquiler. Una vecina de allí de Castilleja lo que me pone en conocimiento es que tiene opción a compra por 300.000 euros«, aseguraba María Patiño.
«Una de las obsesiones, entre comillas, de Irene para, de alguna manera proteger el futuro de sus hijas, era por fin tener una propiedad a su nombre«, afirmaba con rotundidad la periodista. «No estoy hablando de una persona interesada, que no se me malinterprete, sino ante una situación que probablemente ella vea que sea irreversible, piense más con la cabeza y no con el corazón y voy a arreglar mi vida, y si tengo que tomar una decisión, que por lo menos ahora mis hijas tengan una casa que hasta entonces no tenían».
¿Será esa situación irreversible una infidelidad de las que tanto le salen a Kiko Rivera?
Sea como fuere, ese podría ser el motivo real del por qué se habrían ido a esta casa tan imponente… Que Irene tenga en el día de mañana, por si el matrimonio al final no funciona, un hogar para sus pequeñas Ana y Carlota.
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