Lydia Lozano ha sido calificada por sus compañeros como una auténtica aprovechada. Desde su operación de cervicales, la colaboradora necesita unos cuidados especiales y el plató de Sálvame ha dicho basta al verla actuar como si nada. ¿Qué ha pasado? ¿Será lo suyo en realidad, un cuento chino? Sigue leyendo y no pierdas detalle a lo que te traemos.
Los cuidados que recibe Lydia Lozano tras su delicada operación

> Tras su operación de cervicales Lydia Lozano volvía a su trabajo en Sálvame con un pañuelo atado al cuello que tapaba su cicatriz y un atractivo enfermero que velaría por su salud en todo momento. Se desplazaba con una silla de oficina por todo el plató, ese sería a partir de ahora, una de las comodidades ofrecidas por el programa.
No podemos olvidar que también se le propuso un servicio completo de peluquería y maquillaje. Sus compañeros, muy preocupados por su mejoría, también colaboraron en hacer de su vida más fácil durante el tiempo que estuviera convaleciente ayudándole todo lo posible en sus tareas diarias.
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Lydia Lozano se divierte y baila efusivamente al ritmo de la música en Sálvame

> Josep Ferré, el actor imitador de referencia en Sálvame apareció, un día más, disfrazado de Miguel Bosé tras las últimas noticias vertidas sobre su persona. Como no podía ser de otra manera, ofreció una actuación musical en directo en la que todos los presentes bailaron y cantaron durante varios minutos.
Incluida Lydia Lozano y de una forma muy efusiva, subía y bajaba los brazos, daba palmas y hasta movía las caderas. Un hecho que hizo que los integrantes del lugar sospecharan de su actitud.
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Jorge Javier y los Kikos a cuchillo contra Lydia Lozano

> Audazmente sus compañeros de programa se daban cuenta de lo que allí acababa de pasar. «¡Miguel, has obrado el milagro!«, espetaba Kiko Hernández a Josep Ferré disfrazado de Bosé.
«Has visto cómo bailaba Lydia, que no se puede ni mover, hay que abrirle las puertas. Ha movido las piernas, las manos, ha levantado el brazo hasta arriba», no tardaba en añadir con el apoyo de Kiko Matamoros.
Jorge Javier, que hacía una reflexión sobre lo sucedido, hacía hincapié en el compromiso de los colaboradores con el programa y su confianza depositada en ellos. «Se ha aprovechado de todo lo que le ha brindado el programa para beneficio propio», dejaba caer.
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Pierde uno de sus mayores privilegios

> A raíz de su problema cervical y su reciente intervención que aún estaría por sanar, Lydia Lozano pidió a su programa, a pesar de las restricciones sanitarias, gozar de un servicio exclusivo de peluquería y maquillaje. Dada la demostración de baile en la que parece estar mucho mejor, Jorge Javier le transmitía la última decisión tomada por dirección.
«El equipo de producción de este programa te comunica que no tendrás servicio de maquillaje y peluquería». La acataba sin rechistar aunque no dudaba en manifestar que no entendía el por qué de la sanción de una necesidad que tiene como básica para poder trabajar en el vespertino.
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Lydia Lozano se defiende frente a los durísimos ataques

> Jorge Javier le manifestaba si tenía intención de «resarcir al equipo» por desempeñar una tarea, que en realidad, y según han podido comprobar, no la necesitaba. «Sí la necesitaba, pero bueno, sigo haciendo rehabilitación, yo no tengo el cuello bien ni puedo coger peso», explicaba mientras repetía los movimientos que su cuerpo sí le permitía ejercer.
A partir de ahora deberá acicalarse en casa, aunque asegura será como una pesadilla por el dolor que le puede ocasionar. «No os preocupéis, yo me tomo mi paracetamol y luego me peino«, concluía enfrentándose a quienes no estaban de acuerdo con su posición.
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Un colaborador se habría chivado a la dirección de la actitud de Lydia Lozano

> «¿Tú crees que detrás de todo esto puede haber alguna compañera que se haya podido quejar?», le preguntaba Jorge Javier Vázquez abriendo un melón que sigue resonando en la cabeza de la periodista. Lydia, por su parte, no se mojaba.
Sonaban nombres como el de Laura Fa, una de sus mayores enemigas públicas después de ponerla a caldo en diversos medios del corazón. Kiko Hernández también era un blanco fácil. Aunque nada está confirmado la verdad es que hay un topo y que pronto podría descubrirse su verdadera identidad.