El estrés es una sobrecarga en la persona que moviliza nuestros recursos para responder a lo que cada uno entiende como una situación altamente demandante, difícil o desconocida. Así lo ha definido la Sociedad Española para el Estudio de la Ansiedad y el Estrés. Por lo tanto, un proceso de adaptación a esas situaciones. En ellas la persona enfrenta los recursos con los que cuenta, o con los que cree contar, con las demandas propias de la situación. El estrés lo sufrimos día a día, tanto en casa como en la calle y hay veces que nos pilla en situaciones donde nos es casi imposible poder controlarlo, por este motivo hemos traído varios consejos que la OCU ha hecho para que no vuelvas a tener que sufrirlo.
Los diferentes tipos de estrés que existen

El estrés es diferente en cada persona que lo sufre y cada uno tiene sus técnica para volver a tomar el control y relajarse. Hay dos tipos de estrés diferentes, el movilizador y el paralizante. Cuando sufres el primero de ellos estás mal pero piensas que cuentas con lo necesario para enfrentar el problema que te ronda por la cabeza, por este motivo sigues adelante con el pensamiento de que puedes con ello. Y el paralizante en el que piensas que no encuentras con los recursos necesarios para enfrentarte al problema y te quedas bloqueado, evitando enfrentarte a la situación.
Los primeros consejos para el estrés y como evitarlo

Saber cómo protegerse frente al estrés y cómo gestionarlo cuando aparece resulta fundamental para prevenir posibles problemas de salud mental. Por este motivo la OCU ha querido dejar unos pasos fundamentales para seguirlos y así evitar sufrir estrés cada vez que se pueda. Son los que mencionaré a continuación.
- Aprende a identificar tus reacciones de estrés y las situaciones que lo suelen desencadenar: ¿qué ocurre?, ¿cuándo?, ¿dónde? y ¿cómo?
- En la medida de lo posible, modifica los aspectos que inciden sobre ese estrés haciendo cambios sobre tu día a día: en la gestión del tiempo, delegando tareas, incrementando el control sobre la agenda laboral, poniendo medios técnicos, etc.
- Ajusta expectativas. Muchas veces asumimos más de lo que podemos abarcar queriendo llegar a todo; otras, proyectamos deseos o necesidades sobre personas, nuestro trabajo o actividades en las que nos involucramos que no se corresponden con la realidad, y esto nos estresa y nos frustra.
Gestiona tu tiempo y no lo pierdas en banalidades

4. En la medida de lo posible, adáptate a las circunstancias. Muchas veces el estrés es consecuencia de la frustración, incertidumbre o descontrol. Aprender a tolerar o contar con estas circunstancias, flexibilizar nuestro comportamiento o asumir que no siempre tenemos el control, puede disminuir las respuestas de estrés.
5. Anticípate al estrés en esas etapas, responsabilidades o actividades de forma que no te sobrepasen cuando se acumulan.
6. Gestiona tu tiempo, es uno de los bienes más importantes, escasos y estresantes que tenemos. Organiza y planifica razonablemente tu día a día según tus responsabilidades o capacidades; cuando algún aspecto requiera de mayor atención o genere estrés, prioriza y disminuye la carga por otro lado; reserva regularmente momentos de descanso, desconexión y, sobre todo, algo que te divierta.
Cuídate a ti mismo como la persona más importante de tu vida

7. Practica el aquí y el ahora con atención plena a lo que estés haciendo. Anticiparte a lo que vendrá después o a lo que tienes pendiente no va a hacer que se solucione o que termines antes.
8. Cultiva otras áreas de tu vida: fomenta el contacto social, las actividades de ocio, hobbies… todo aquello que te aporte bienestar y equilibre tu vida con “zonas libres de estrés”.
9. Fomenta tu autocuidado con una alimentación sana y equilibrada, cuidando la calidad del sueño, haciendo ejercicio de forma regular, etc.
Los últimos consejos para el estrés y como evitarlo

10. Aprende alguna técnica de relajación que puedas practicar de forma regular, pero especialmente cuando tengas picos de estrés.
Esperemos que estos consejos te hayan servido de ayuda y puedas usarlos cada vez que empieces a sufrir estrés. Apréndetelos y úsalos como mantra cuando tengas un problema de este tipo así evitarás tener algún trastorno de salud mental en el futuro. Diez fáciles y sencillos pasos que te ahorrarán más de un quebradero de cabeza. El estrés es algo que se puede evitar con esfuerzo y dedicación.