Uno de los sueños de María Teresa Campos siempre ha sido tener su propia marca de zapatos. Con 76 años decidió montar su marca, contando con la experiencia de toda una vida comprando los complementos más caros.
Aunque su ropa es generalmente la de una mujer mayor, sus zapatos no han cambiado con el tiempo. Son su eterno elixir de la juventud lo encuentra cuando se sube a esos 11 centímetros. Conocemos a la gran empresaria María Teresa Campos y nos ponemos en sus zapatos.
El E-commerce de María Teresa Campos
Para maximizar beneficios María Teresa optó por un modelo digital para su tienda de zapatos. De esta manera se evitaba las costas de tener una tienda física con personal contratado, alquileres o compras de locales. La tienda online posee la capacidad productiva que la matriarca del clan quería.
Su primera colección de zapatos, de la firma MTC (las iniciales de Maia Teresa Campos) se apoda con grandes capitales mundiales. En un intento de llamar la atención del mundo de la moda. Paris, Londres, Alicante y Berlín tienen el sello de la marca Campos impreso. Además de presentadora de éxito, María Teresa quiere ver su sueño de diseñadora cumplido.
Colección al alcance de unos pocos
Los zapatos de la Campos no están al alcance de todo el mundo. Tienen unos precios que son un tanto prohibitivos. Para el clan Campos gastar 200 euros en unos zapatos es lo más normal del mundo. Pero para el resto de la humanidad es algo un tanto exagerado. Ni las marcas más conocidas en las tiendas tienen estos precios.
Una de las críticas más polémica ha levantado ha sido el precio de cada pieza. Evidentemente es una forma de aumentar el margen de beneficios que se verá totalmente incrementado con cada compra. Piezas que según ella son arte y como tal deben tener un valor añadido para convertirse en el centro de todo vestidor.
Alejandra la diseñadora
Los concomimientos de María Teresa Campos en zapatos tienen más de seis décadas. Durante ese tiempo la presentadora ha vestido sus pies con la máxima calidad posible. Estar todo el día en un plató de televisión y mostrar al mundo su mejor cara, pasaba por estar bien calzada. Siempre ha concebido los zapatos como pieza estrella.
Su vestidor dice que es un elemento que heredarán sus hijas y nieta. La misma Alejandra, hija de Terelu, ha sido una de sus ayudantes en el diseño de su colección. La niña ha llevado a su abuela al siglo XXI, explicándole las tendencias más actuales. Así es como las Campos trabajan, unidas varias generaciones en una sola causa.
Amante de los zapatos
Los zapatos de María Teresa Campos son sus niños. Los cuida y los mima hasta límites insospechados. Dispone de un gran vestidor y de varias plantas en donde guarda sus tesoros. En el sótano es donde están sus preferidos, lejos de la luz del sol y esperando poder ser recatados por sus hijas.
Son sesenta años de carrera que dan para muchos zapatos. María Teresa recuerda cada acto en el que se los ha puesto. Cada sensación que ha conseguido con ellos. Se mira en el espejo y se siente transportada a ese mundo de fantasía que, junto a sus hijas, ha creado. Se ha convertido en toda una experta en el mundo de los zapatos de lujo.
Lacraoix y Prada
Las piezas preferidas de María Teresa son los Lacroix, con un precio que no bajan de los 500€. Tiene decenas de pares de los que presume orgullosa. Sus delicados pies se sienten cómodos vistiendo una de las marcas más prestigiosas del mundo, realizados en piel y con unos diseños increíbles que cumple con los sueños de la matriarca de las Campos.
La otra gran marca fetiche de la estrella de la televisión es Prada. Una de las firmas más famosas del mundo que solo está al alcance de unos pocos, ya que estamos hablando de precios que pueden llegar a los 1.000 euros por par perfectamente. Un capricho un poco caro que se ha ido permitiendo a lo largo de los años.
Una herencia (solo en zapatos) millonaria
La reina de los zapatos lo dejará todo a sus dos hijas. Miles y miles de euros que caerán directamente a los pies de sus descendientes. Los ‘Manolos’ que tanto quiere y que, según dice, no le importa lucir, con sus más de 11 centímetros de altura, pasarán a los pies de Terelu y Carmen. Algo que puede convertirse en motivo de disputa.
De momento sus años no son un impedimento para lucirlos, y aunque dicen que a partir de cierta edad es mejor utilizar zapato plano, María Teresa Campos no lo tiene tan claro. Cuanta más alta, mejor se siente y eso no cambiará de momento. Si sus hijas quieren utilizar los zapatos de su madre tendrán que seguir pidiéndole permiso a Teresa.