El jamón ibérico es uno de los mayores manjares de nuestra gastronomía patria. Nos encanta comerlo solo o con un trocito de pan, pero también es un condimento ideal y muy sabroso para dar el toque final a algunos platos más elaborados. Para que puedas sacarle todo el partido, hoy te traemos algunas recetas elaboradas con este lujoso ingrediente con las que siempre quedarás bien ante tus comensales invitados.
El jamón ibérico con tomate y aceite de oliva virgen extra

Esta es una de las recetas más tradicionales y una de las formas de servir tu mejor jamón ibérico más exitosas. Es una elaboración muy sencilla, pero cuando tienes un buen producto a veces es mejor sacarlo a relucir sin muchas florituras.
Para ello necesitarás jamón ibérico de bellota, tomate maduro para triturar, tomates cherry, aceite de oliva virgen extra y sal. Si encuentras estos productos en un mercado y de buena calidad para no desmerecer ese fantástico jamón el plato quedará redondo.
La receta del jamón con tomate

Es muy habitual tender a restregar aparatosamente el tomate sobre el pan, y además una costumbre de muchas zonas de nuestro país especialmente en el Mediterrráneo. En este caso, te proponemos anticiparte y dejar un bol con tomate triturado y aliñado, con un poco de aceite y sal.
Si lo haces de esta forma cada comensal se servirá con una cucharita la cantidad que le apetezca. Además, combina esta mezcla con un platito o bol de tomates cherry, que se comen de un bocado y con las manos, y que ejercen la función de refrescar la boca entre tanto jamón y pan. Con estas sencillas maniobras tendrás un entrante ideal o una cena de picoteo.
Los champiñones portobello rellenos de queso feta y jamón

Esta es una combinación ganadora para cualquier plato: champiñones, queso y jamón. Si además el jamón es un ibérico de los que tienen un sabor espectacular auguramos un gran éxito. Para esta receta necesitarás 150 gramos de queso feta, 80 gramos de jamón serrano en daditos muy pequeños, queso parmesano recién rallado, orégano, romero, tomillo, ñora molida, aceite de oliva virgen extra, 4 champiñones Portobello gigantes, 250 gramos de caldo de jamón y una pizca de sal.
Para preparar los ingredientes primero se corta el queso feta en dados y se ponen en un bol, se añade el jamón ibérico también en daditos, pero más pequeños. Se ralla el queso parmesano y se incorpora al bol junto al orégano, el romero, el tomillo y la ñora molida. Finalmente añade el aceite de oliva virgen extra y mezcla bien. Esto se reserva.
La receta de los champiñones con jamón

Para meternos de lleno en la receta, primero se limpian bien los champiñones Portobello y se corta el pie. Se pone una cazuela baja o sartén amplia. También necesitarás que tengan una tapa que encaje. Se rellenan las setas con el queso feta y jamón y se pone un chorrito de aceite de oliva virgen extra a calentar en la cazuela. Se colocan los champiñones rellenos ordenadamente y se deja que se frían un poco. Después, se baja el fuego del caldo a temperatura media-baja y se tapa la cazuela, de este modo se cocinarán las setas y el queso se fundirá.
Cuando las setas estén cocinadas, se destapa la cazuela, se sube el fuego para que el caldo de jamón ibérico reduzca y se mueven un poco los champiñones para que no se queden pegados. Se retira la cazuela del fuego. Sobre una bandeja o un plato con brotes verdes, lechuga o canónigos (al gusto) se colocan los champiñones rellenos de queso y jamón . Si ha quedado caldo reducido, adereza con él el plato.
El jamón ibérico con lascas de parmesano y pistachos

Otra forma muy natural de elaborar una receta con jamón ibérico sacándole todo el partido y aprovechando este ingrediente como uno de los protagonistas es la combinación con parmesano y pistachos. También servirá como aperitivo, entrante o como cena ligera. Es especialmente apetecible en la época de calor, cuando las cenas informales están a la orden del día.
Para elaborar esta preparación vas a necesitar jamón ibérico de bellota, un trozo pequeño de Parmesano, un puñado de pistachos y aceite de oliva virgen extra. Verás como esta combinación es mucho más deliciosa de lo que pueda parecer, con elementos tan sencillos como los mencionados.
La receta del jamón con parmesano

Verás como esta receta con jamón ibérico es muy sencilla y ofrece un gran resultado. Para este plato primero tendrás que cortar con una mandolina o con algún utensilio que te permita sacar lascas el queso parmesano. Lo ideal es que hayas escogido un buen producto que encaje con la calidad del jamón ibérico.
Una vez cortado el queso se debe repartir sobre el jamón presentado en un plato. A continuación, se salpica con pistachos pelados y en trozos muy pequeños y se riega con un hilo de aceite. Esta combinación te ofrecerá una mezcla de sabores magistral y las texturas adecuadas, ya que el aceite hará el plato menos seco y los pintachos ofrecerán un punto crujiente y saciante muy agradable. Acertarás si lo acompañas con un buen vino.