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Manuel Bedmar, novio de Rocío Flores, el último en subirse al carro de la familia de la más grande

Manuel Bedmar, es conocido por ser el novio de la nieta de Rocío Jurado, Rocío Flores. La joven que se ha dado a conocer un poco más tras su paso por Supervivientes quiso presentar a su tímida pareja como su firme defensor cuando ella vivía una de las aventuras de su vida. Ahora, él se abre Instagram y además de saber sobre sus gustos y aficiones hemos visto que se ha convertido en todo un influencer pues sus seguidores están creciendo como la espuma. Si no fuera quien es y su contenido no fuera en un buen porcentaje con su novia, no tendría tanta audiencia. Por ello, decimos que es uno más que se sube al carro de esta mediática familia cuyo miembro principal y del que todos comen a día de hoy ya se fue. ¿Quieres saber lo que comparte? ¿Cómo se ha ganado el corazón de Rocío y por qué mantiene el fuego de esa llamarada? Te contamos esto y mucho más a continuación. ¡No te lo pierdas!

Manuel, el novio de Rocío Flores, ya tiene identidad propia

Manuel Bedmar, novio de Rocío Flores, el último en subirse al carro de la familia de la más grande

> Con más de 61.000 seguidores en Instagram, no cabe duda que Manuel Bedmar vale para esto. El motor es una de sus pasiones, los coches y las motos son su debilidad. El fortalecimiento de la pareja que forma con Rocío Flores le ha servido como trampolín hacia la fama y podemos decir que tiene tablas para ello. Es bastante activo en redes y la vergüenza que al principio mostraba en todas sus apariciones se ha disipado al completo. Poco queda de aquel chico que se escondía para que la prensa no le atosigara a preguntas pues ha dado un paso decisivo y ha decidido hacer públicas sus redes sociales.

Comparte tanto fotografías solo como acompañado, eso sí, en las que sale con alguien podéis imaginaros quién es ese alguien. Su novia Rocío Flores de la que está muy enamorado. Viven en una nube y así lo demuestra su feed de contenidos, también las historias que va compartiendo con sus fans. Además, no duda en aceptar contratos publicitarios con empresas dedicadas al mundo de las sishas y las cachimbas regalando códigos descuentos muy tentadores o adentrarse en el mundo de las bitcoins, unas monedas virtuales, que según él cotizan al alza, para intentar ganar dinero.

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