Isabel Preysler y Mario Vargas Llosas han decidido terminar el verano al más puro estilo Carmen Sevilla. Como muchos famosos, Isabel y Mario están disfrutando de su vacaciones, eso sí, en la más pura intimidad. Pero, ahora, tal y como hemos podido saber, se encuentran en Marbella terminando el mes de agosto con la mirada puesta ya no solo en descansar y tener unos días de relax. Ambos han decidido visitar la clínica más famosa de la ciudad andaluza y empezar así un nuevo hábito alimenticio que prometer ser muy terapéutico para la pareja.
Si por algo está ahora Isabel Preysler en el foco mediático es por el gran lanzamiento del documental de su hija para Netflix. La gran protagonista está siendo sin duda Tamara Falcó, pero es muy difícil que su madre no esté en boca de todos. La hija de la socialité está abriendo su mundo a través de los capítulos subidos en la plataforma y en los que poco a poco podemos conocer nuevas historias que unen a la exconcursante de ‘Masterchef Celebrity’ con su madre. Además de descubrir el día a día de la marquesa de Griñón a sus 40 años.
Isabel Preysler y el escritor se relajan en la clínica Buchinger
>Es la clínica más famosa de Marbella y mucho tiene que ver Carmen Sevilla en que la clínica Buchinger sea hoy conocida. Para poneros en contexto, queridos cotillas, vamos a descubrir a continuación que es lo que lleva a muchos famosos a elegir este centro para desconectar y relajarse. La clínica ofrece un tratamiento terapéutico basado en el famoso ayuno Buchinger, donde diariamente se ingieren 250 calorías en alimentos líquidos y que según su creador, sirve para que el cuerpo viva durante una temporada de sus reservas grasas. Así pues, se evitarían enfermedades cardiovasculares o se regularía el estrés.
Esta estancia terapéutica se lleva a cabo en un complejo donde los teléfonos móviles no están permitidos y donde existen duras restricciones. Los allí hospedados no pueden dormir fuera de la clínica sin consentimiento del médico, pero lo más sorprendente es que tampoco puedes hablar si no es en la habitación. Eso sí, dentro del lugar los internos tienen un abanico de planes culturales de los que elegir conciertos, clases de cocina, yoga o excursiones a los que acudir.
No es la primera vez que Isabel Preysler y Vargas Llosas deciden pasar el final de su periodo de vacaciones en esta clínica. Así pues, la pareja ha hecho que este sea su sitio de desconexión tras un largo verano de calor, y seguramente, excesos. Está claro que ambos quieren retomar su agenda de trabajo y eventos con todo el estrés fuera. Algo que hacía también Carmen Sevilla para según ella «quitarse los excesos» y por lo que la clínica cogió cada vez más popularidad en la tierra malagueña. Y, es que, cabe destacar que solo existen dos centros en el mundo, uno en Alemania y otro en Marbella.
Tamara Falcó toda una marquesa de documental
>Si Isabel Preysler es protagonista ahora mismo del mundo mediático es por el documental que protagoniza su hija, Tamara Falcó. La marquesa de Griñón no ha dudado en abrirse en lo que ha sido su primer proyecto en la plataforma de streaming. Se está poniendo de moda esto de llevar la vida de los famosos a la pequeña pantalla en forma de documental o docuserie, como ya ha sido el caso de Georgina Rodríguez, que podría estar grabando ahora mismo la segunda parte para Netflix tal y como os contábamos en Cotilleo.es. Ahora y bajo el nombre de ‘La Marquesa’, hemos podido conocer nuevos detalles sobre la socialité y su gran familia.
Lo que más ha sorprendido entre los espectadores de la docuserie es descubrir que Isabel Preysler también se ha corrido sus juergas. Sí, queridos cotillas, Studio 54 era, por lo que hemos podido ver, el sitio perfecto para que Preysler y otras amigas, como Carolina Herrera, pasaran sus mejores noches de fiesta. «Nos hemos divertido como unas locas. Y hemos bailado hasta las cinco de la mañana», así lo aseguraba la propia diseñadora frente a Tamara Falcó en uno de los episodios del formato documental.
No solo es algo que a la gente de calle nos haya sorprendido, es que la propia Tamara Falcó no daba crédito ante lo que estaba escuchando, y, evidentemente, también tenía su opinión: «Me hace gracia porque yo las veo tan elegantes y tan peripuestas…», decía en primer lugar para luego rematar con un «no me las imagino dándolo todo».
Sin duda, la ganadora de la cuarta edición de ‘Masterchef Celebrity’ está dando mucho de que hablar en esta tanda de episodio sobre su vida, en la que además se ha podido conocer el elegante ático que se ha comprado a sus 40 años, pero la verdadera experiencia para muchos es ver cómo madre e hija interactúan fuera de los altos estándares a los que nos tienen acostumbrados.
