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Por qué hay gente que odia a Pelayo Díaz: sus mayores polémicas

Indomable. El propio Pelayo Díaz escribió como título de su autobiografía este calificativo, que es como quiere verse para con los demás. Desde que saltara de las pasarelas al mundo del estilismo mediático, las polémicas le han acompañado. No en vano, tal es el odio que en muchos casos genera que ha llegado a recibir incluso amenazas de muerte. Eso sí, él no se anda con disimulos en sus palabras, lo que le ha granjeado muchas críticas y enfrentamientos con compañeros y personajes públicos. En Cotilleo.es recorremos sus mayores polémicas, las que le han ocasionado ser ‘odiado’ por muchos.

El nombre de Pelayo Díaz sonó primero como uno de los bloggers de moda más seguidos y a la vez polémicos. Su blog Katelovesme alcanzó tal número de seguidores y fama que marcas de lujo como Louis Vuitton o Alexander McQueen no dudaron en colaborar con él. A día de hoy sigue siendo un it boy que inspira a muchos aunque también levanta muchos odios por su forma de ser. Presente siempre en las principales pasarelas del mundo de la moda, y codeándose incluso con la Reina Letizia, su paso por cualquier plató y sus publicaciones en redes sociales no pasan desapercibidas.

PELAYO SOBRE LAS EXCENTRICIDADES DE BOSÉ: NO ES TAN DESCABELLADO

Otra de las grandes polémicas de Pelayo Díaz durante la pandemia fue el momento en el que saltó a la palestra Miguel Bosé alineándose con las teorías negacionistas y conspirativas del 5G. En el repaso que hicieron en Hormigas Blancas de la trayectoria del cantante, Pelayo Díaz sorprendió a los asistentes y a la audiencia apostando por lo creíble de los argumentos de Bosé. “No es tan descabellado. Si hace años nos dicen que podríamos hacer la compra con la nevera o que íbamos a hablar con un altavoz para pedir música nos hubiésemos reído”, comenzó el estilista su intervención. “Nos tienen controlados desde hace un montón, cada vez que conectaban con el director de Facebook desde su casa se veía con la cámara tapada, los altavoces desconectados”, seguía.

Cuando todos se volvieron en su contra, insistió de nuevo: “Llámalo obsesión, llámalo rabieta, pero se le ha metido esto en la cabeza y es muy libre de creerlo. Al igual que yo se lo he puesto a mi perro, me pueden poner una vacuna y meterme un chip para controlarme”. Para rematar, sentenció: “Igual es que ya tenemos ese ‘chip’ desde hace mucho tiempo y no lo sabemos”.

pelayo díaz