Leonor y Sofía son las dos hijas descendientes de los Reyes de España Felipe VI y Letizia. A simple vista pueden parecer gemelas, ya que solamente las separa un año y medio. Pero en realidad son dos personas muy distintas con caracteres contrapuestos.
Unas niñas, Leonor y Sofía, que se han mantenido al margen de la opinión pública, en la medida de lo posible, lejos de cualquier especulación sobre tu futuro. Lo cierto es que todos sabemos que pasará con Leonor y Sofía. La mayor será reina y la pequeña nada más que la hija de un rey y hermana de una reina, una casi plebeya.
La verdadera Familia Real
La pequeña familia del Rey Felipe VI nada tiene que ver con la que planificó en su día. Cuando se prometió con Letizia se enorgullecía de querer tener una familia numerosa. El haberse criado con sus hermanas le llevaba a pensar en crear un hogar parecido al que vivió en su infancia.
Por su parte, Letizia también procedía de una familia numerosa, compuesta por solo chicas. En su mente estaba la idea de cumplir con sus obligaciones como reina, pero sin pasarse. Tenía más que claro que solo tendría dos hijos. Y, por el bien de la corona y el de su propia familia así ha sido.
Con la L de Letizia
Leonor nacía una fría mañana del último día de octubre. El parto de la entonces Princesa de Asturias en la clínica Ruber causó una gran expectación. El sexo del bebé determinaría el futuro de la Corona española. Se trataría en este caso de una niña que se convertiría en la primogénita de una Familia Real.
Entre los nombres que barajaba la pareja, estaba el de la abuela paterna. Sofía estaba deseosa de que le pusieran a su nieta su nombre, pero finalmente no lo consiguió. Se optó por un nombre que empezaba por L, por ser la misma letra inicial de Letizia. Leonor es el nombre por el que se decantaron, el de una reina castellana muy adecuado.
En el nombre de la abuela
La segunda hija de los reyes nació después de un proceso traumático. Unos meses antes, Letizia había dicho adiós a su hermana pequeña. Una pérdida enorme para la familia Ortiz de la que le costó levantar cabeza. Esa niña era lo único que les hacía sentirse algo más alegres día tras día.
En mayo nacería Sofía, esta vez si que utilizarían el nombre de su abuela. Una niña que cerraba el debate sobre la Corona de España y que sería la alegría de la casa. Aunque nació en un momento convulso para la familia, Sofía siempre nos ha regalado una sonrisa. Además, es la que más se parece de las dos a su madre Letizia.
Leonor y Sofía: El fin del conflicto de sucesión
El conflicto de sucesión en la Corona española se cerraba con la llegada de la segunda hija de los Reyes. No había lugar a dudas. Sin ningún varón a la vista, no sería necesario reformar la Constitución Española para que Leonor se convierta en reina. Además, Leonor tendría el privilegio de ser Princesa de Asturias ya que su padre el rey no tendría ningún hijo varón.
Muchas han sido las batallas por la Corona Española a la largo de la historia. El no tener descendencia masculina sería visto en otros tiempos como una manera de acabar con la línea sucesoria. Leonor en el momento de casarse y tener hijos, dejará el apellido de Borbón en un segundo plano frente al de su marido.
Protección excesiva
Sofía y Leonor han estado protegidas de forma excesiva por su madre Letizia. En su idea de que fueran unas niñas normales las ha llenado de miedos y de tabús. Siguen una dieta equilibrada, lejos de las chucherías de los niños de su edad. Las niñas deben estar siempre perfectas.
No pueden ver la televisión o jugar con las tablets fuera de sus horas. Lo primero es la educación y convertirse en mujeres cultas e inteligentes, como su madre. Estudian en el mismo colegio donde fue su padre, y ponen todo su ahínco para ser las mejores de su clase. Las notas son siempre un motivo de alegría en palacio.
Leonor y Sofía, diferencia de roles
Leonor y Sofía parecen casi gemelas. Se llevan apenas un año y por eso suelen verse de la misma estatura y vestidas casi igual. Una fue proclamada desde pequeña princesa y será la heredera del reino de sus padres. Las cámaras se centrarán en ella en el momento en que acabe la protección materna.
La otra tendrá que seguir con su vida lejos de palacio y de los grandes lujos de los que hasta ahora ha disfrutado. Leonor es como su abuela: orgullosa y entregada cuando le dijeron que no sería una niña normal se lo tomó bien. En cambio, cuando Sofía hizo la misma pregunta no se lo tomó tan bien.
Celos por una foto
Los expertos opinan que al futuro desigual de dos niñas traerá de cabeza a la Casa Real Española. Los celos entre ambas van a aparecer y pueden crear una adolescencia más que complicada. Se trata ahora de niñas que están empezando a ver la realidad, algo que será mucho más impactante para una de ellas.
Una de las primeras muestras de roce entre ellas la vimos en una foto para la Casa Real. Leonor, posaba con su padre y abuelo, mostrando así a las tres generaciones de reyes de España: El Rey emérito, el Rey actual y la futura reina. Mientras que Sofía quedaba apartada en un rincón. Fue tal el enfado que tuvieron que hacerse una foto también con ella, aunque esta se quedaría para el recuerdo en un cajón, oculta, como ella, en la intimidad de su casa.