Ada Colau es la primera alcaldesa de Barcelona, una mujer que quería ser famosa a toda costa. Los políticos que se sientan en la silla del ‘Deluxe’ suelen ser más bien pocos. Se trata de cargos públicos que quieren un poco más de notoriedad. En plena campaña electoral de Cataluña, la decisión de Colau fue muy polémica.
Cobrando de las arcas de la ciudad de Barcelona y teniendo un sueldo nada despreciable, no ha dudado en airear su vida privada y hacer de ella una forma de conseguir más adeptos. Ada Calou es una alcaldesa que quiere ser famosa sea como sea.
Ada Colau, una alcaldesa atípica
Ada Colau es una de esas alcaldesas que no deja indiferente a nadie. Se trata de una barcelonesa de pura cepa que se crió en uno de los barrios más humildes de la ciudad condal. Desde su personal perspectiva, se presentó a las Elecciones Municipales de 2015. En aquél entonces se trataba de una de las primeras mujeres candidatas de la historia de Barcelona.
Después de una victoria totalmente inesperada, Ada hizo historia. Aquella mujer que quería cambiar el mundo, empezaría por su ciudad. Es desde entonces uno de los pesos pesados de la política catalana. Ejerce su poder desde un feudo que no está dispuesta a abandonar y pretende mantener a toda costa.
De la Plataforma de Afectados por la Hipoteca
Colau se hizo popular por ser una de las portavoces de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) de la ciudad condal. A través de sus intervenciones televisivas y su papel de súper heroína se hizo famosa. Todos pensaban que se trataba de una abogada en busca de ayudar a las personas, sin ningún tipo de pretensión.
En realidad, era solo una mujer que sabía hablar bien y disponía de tiempo para ir a defender los derechos de los desahuciados. Proteger al más débil fue su manera de incidir entre el pueblo y hacerse ver entre todos. Su camiseta verde solamente se la quitó cuando llegó el momento de recoger la vara de alcaldesa.
Sin oficio previo
Colau es una de las políticas más criticadas por su nivel de estudios. En general, los políticos pueden justificar sus acciones detrás de un buen currículum. Una carrera que les da un cierto respeto, y una profesión en la que hayan desarrollado su trayectoria vital, es una forma de atraer votantes.
En el caso de Ada, todo cambia. Pisó la universidad solo para quedarse con la parte lúdica: Las fiestas y los foros de debate eran su rincón favorito. No pasó del bar al aula salvo en contadas ocasiones, ya que aquella cafetería era el lugar donde expresaba sus ideas en compañía de sus amigos filósofos, que sí se licenciaron.
Un Erasmus especial
Con el programa de intercambio europeo ‘Erasmus’, Colau aprovechó para explorar su sexualidad. Se trata de un programa que se financia con fondos de la Unión Europea, en el cual los estudiantes que lo solicitan pueden ir a una ciudad europea a profundizar en sus carreras universitarias durante seis meses o un año. Pero Ada, en vez de invertir su tiempo en aprender en el aula, aprovechó para aprender fuera de ella.
A llegar a la ciudad que le fue asignada, conoció a una estudiante italiana que cautivó su corazón. A partir de entonces descubrió su supuesta bisexualidad, que explicó con pelos y señales a su amigo Jorge Javier Vázquez. En prime time y en directo, dejó al pueblo con la boca abierta. Un gesto de desmesurada sinceridad que no debió de ser del agrado de sus asesores.
Bisexualidad natural
Esta madre de dos hijos y cabeza visible de su partido y ciudad, habla de su bisexualidad con total naturalidad. En la sociedad en la que vivimos, es un aspecto cada vez más común. Además, tal y como ella explicó, no es que le apeteciese experimentar con su sexualidad, sino que simplemente surgió, como algo natural e irremediable, el que se enamorara perdidamente de aquella mujer.
Marcó tanto aquella relación a Ada Colau que todavía hoy en día, previo pago de una buena cantidad de dinero al conceder la entrevista, lo explica. No desea que este anuncio la perjudique, sino que espera que sirva para que muchas personas se atrevan a dar el paso de hablar en público sobre el tema. El amor de Colau por la gente no tiene fin, y quería contarlo en la televisión para dar una lección en público.
Una agresión sexual
No solo la bisexualidad de la alcaldesa de Barcelona hizo que la audiencia del ‘Deluxe’ del pasado sábado estuviera por las nubes. Colau siguió contando sus intimidades más profundas, desnudando su alma por completo y repasando episodios realmente duros.
Entre las confesiones que ofreció, estaba la de una agresión sexual que tuvo que sufrir. Colau era una adolescente que, como ella misma se definía «era la rarita de la clase», que luchaba por descubrir su verdadera personalidad. Con 16 años sufrió un intento de agresión sexual que la marcaría para siempre. De esta manera, Colau hablaba abiertamente de este duro trance por el que tuvo que pasar en su vida, y por el que otras muchas mujeres, sin un altavoz tan claro, también han tenido que pasar.
En Comú Podem
La parte más emotiva se la llevó la familia de Colau. Uno de sus grandes puntales personales y profesionales que la han llevado a ocupar la silla más deseada de la ciudad de Barcelona. Adrià Alemany es su marido y padre de sus hijos. Desde que se conocieron nunca se han separado ni un segundo.
Alemany es uno de los pesos pesados del partido de En Comú Podem y ha ayudado a Ada Colau a ocupar el cargo que ostenta. A su vez, ella le devolvió el favor, disfrutando Adrià así de un cargo de confianza, por el cual también percibe una remuneración a final de mes. Como miembro de la ejecutiva de la alcaldesa y esposo de esta, ambos viven habiendo cumplido el sueño que tenían en común.
La sobrina preferida de la Reina y de sus hijas es, sin duda, la 
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