Letizia Ortiz ha visto como su vida ha dado un giro de 180 grados. La actual Reina ha pasado de ser una plebeya, con una vida normal y corriente, a ser la clara protagonista en el foco mediático.
Los actos y eventos de cualquier ámbito se convierten en el centro de su agenda, dónde como puede va ajustando las diferentes tareas o hobbies. Mucho se critica que la vida de los reyes es parecida a un paraíso, pero ¿realmente es así? Veamos como podría ser su día a día, si estuviera expuesta las veinticuatro horas del día.
Los buenos días de Letizia Ortiz
Como todos los días, la alarma del despertador irrumpe el sueño tranquilo de Letizia, sobre las seis y cuarto. Seguramente como todos, apague la alarma y cierre los ojos, pensando que todavía tiene unos minutos más. No obstante, pronto y con un bostezo, se pondrá en marcha con energía para afrontar un nuevo día mediático.
Una rápida visita al aseo dónde, con la ayuda de su peluquera de confianza, ordena su cabello y se maquilla. Rápidamente se dirige a la habitación de sus hijas, Leonor y Sofía.
Con una sonrisa propia de madre, despierta a sus hijas y las ayuda a preparase para irse al colegio. Mientras las niñas se visten y asean, Letizia baja a la cocina para preparar el desayuno de las pequeñas: Leche, cereales, zumo, fruta…
Empieza su día a día
Una vez han desayunado y preparado para ir al colegio, la reina coge las llaves del coche, y con una sonrisa se dirige al colegio de sus hijas. Con calma y respetando siempre las normas de circulación, se despide de sus hijas en la puerta del colegio. Donde espera paciente a que las pequeñas entren.
Así, la Reina vuelve al Palacio con calma. Se sienta y empieza a organizar la agenda. Revisa la prensa mientras desayuna, para enterarse de todas las novedades. Y, por supuesto, seguro que ojéa alguna revista del mundo del corazón.
Tras estos minutos dedicados a ella, Letizia se pone en marcha. Si tiene algún evento o acto, como suele ser habitual, elige entre las propuestas como va a vestir ese día.
Unos momentos de tranquilidad para la Reina Letizia
Si el acto empieza por la tarde/noche, y ya tiene todos sus quehaceres hechos, aprovecha su escaso tiempo libre para ir de compras, acompañada únicamente de sus escoltas. O bien, decide hacer algo de deporte. Ya sea ir a correr, como ir, según se rumorea, a clases de zumba.
Mantenerse ocupada y haciendo deporte, es uno de sus secretos para seguir estando enérgica y activa, día tras día. Así, tras llegar a casa( si tiene tiempo) se relajaría, antes de recibir con los brazos abiertos a sus hijas.
Letizia Ortiz y sus tardes con eventos
Pese a los rumores de que sus discursos los escriben otros, ella ha afirmado, en más de una ocasión, que es algo que le gusta hacer a ella. Incluso se rumorea que modifica cosas de los discursos del propio monarca.
Tras saludar a sus hijas a la vuelta del colegio, Letizia se viste y se va al acto en concreto. En su día a día, la Reina nunca bebe alcohol en público, sólo cuando está en medio de un brindis público. Así, tras la salida del evento/acto vuelve, de nuevo, a su hogar.
Las buenas noches de Letizia Ortiz
Tras llegar a su casa, saluda a sus hijas y les da las buenas noches. Así, tranquilamente, vuelve a revisar a la agenda para comprobar lo que hará el día de mañana.
Dependiendo del día, puede que se sumerja en un lectura o puede que simplemente se distraiga hablando con el Rey Felipe VI. Contándose y poniéndose al día. Y, tranquilamente, se va a dormir. Dispuesta y con ganas a empezar de nuevo, un día más.