Hace pocos días veíamos al Rey emérito Juan Carlos I cogido del brazo de su hijo el Rey Felipe VI en Londres, con motivo de la misa en honor al último rey de los helenos, el rey Constantino de Grecia, hermano de la Reina Sofía.
Ante esa tierna imagen de padre e hijo juntos después de todo lo ocurrido se ha abierto el debate de sí es ya la hora de que Juan Carlos I vuelva a nuestro país.
Con estas imágenes “se vio en público algo que lleva mucho tiempo ocurriendo en privado” ha asegurado la periodista Mariángel Alcázar. Es significativo leer entre líneas y ver que no se ha evitado esa foto. Se desconoce si la familia del Rey ha buscado esa instantánea, si realmente estaba planeada o simplemente si han actuado con naturalidad.
En lugar de que Juan Carlos I se apoyara en la persona en la que normalmente lo hace para caminar, fue el Rey Felipe VI quien le tendió la mano y nos dejaron ver ciertos gestos que muestran una cierta cercanía entre padre e hijo. Eso no quiere decir que la relación institucional tenga que cambiar, pero lo que sí ha cambiado o al menos así lo han querido mostrar es la relación familiar.
