Esta está siendo una de las semanas más frenéticas para la reina Letizia, que continúa haciendo de anfitriona en cumbre de la OTAN. Una celebración que está poniendo patas arriba la rutina semanal de la capital. También para la primera dama de Estados Unidos, Jill Biden, y la reina Letizia.
La mujer del presidente estadounidenses, Joe Biden, ha vuelto a encontrarse con la monarca mientras se producen las reuniones de la organización que se desarrolla en nuestro país en los últimos 25 años en la que se va a conmemorar el 40º aniversario de la adhesión de España a la Organización del Tratado del Atlántico Norte.
Así, horas después de acaparar todas las miradas durante la cena de gala que ofrecieron los Reyes en el Palacio Real, en la que acaparó todas las miradas recuperando su elegantísimo vestido negro silueta new lady de The 2nd Skin Co, la monarca ha vuelto a mostrar su complicidad con nuestra monarca durante la visita al Palacio Real de la Granja de San Ildefonso en que la Letizia no le ha podido prestar toda la atención que le hubiese gustado a Jill.
El secreto peor guardado de la primera dama
>Como os contábamos durante esta semana Jill Biden, que estaba acompañando a su marido durante su viaje por Europa que ya se encuentra en nuestro país, adelantó su estancia en España para compartir un tiempo de oro con nuestra reina Letizia.
Fue el domingo por la noche cuando la primera dama estadunidense aterrizó en el Aeropuerto Militar de Torrejón de Ardoz, que es donde se suelen recibir a todas las personalidades que llegan a España. Pues justamente después de ese momento, cuando abandonaron la base aérea, Jill hizo algo que en Cotilleo.es nunca nos hubiésemos imaginado.
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