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Así fueron los inicios de Miguel Lago, el colaborador más polémico de «Todo es mentira»

Miguel Lago es el protagonista de hoy. Ayer desvelábamos los detalles más curiosos de la vida de Marta Flich, hoy nos aventuramos con otro colaborador de Todo es mentira. Se trata del polémico e inigualable Miguel Lago, otro de los compañeros de Risto Mejide que tiene todo un pasado digno de sacar a la luz.

Y es que, seguramente no lo recuerdes pero el cómico protagonizó uno de los realities más curiosos y arriesgados de Antena 3. Nacido en Vigo, el comunicador ya desde muy jovencito mostró gran interés por el mundo del humor. Pero su historia resultó ser como la de su compañera Marta – que estudió economía y acabó persiguiendo su sueño de actriz -. Así fue como, su camino guiado por la filología inglesa se desvió hacía el Club de la Comedia. Aunque, si algo le caracteriza es su humor sincero, el mismo que le ha hecho meterse en más de un lío a lo largo de los años. ¿Recuerdas cuando pedían su cabeza por un tweet bromeando sobre la Infanta Elena? Bueno, pues si lo has olvidado o no te enteraste, ¡Nosotros se lo recordamos! Todo eso y más sobre el movidito pasado de Miguel Lago, te lo desvelamos aquí.

Miguel Lago, el profesor más estricto de la televisión

Miguel Lago

> Seguramente no lo recuerdes, pero Miguel Lago en su día interpretó a uno de los profesores más enigmáticos de la televisión. Si, tal como lees, se trata de Don Luís, el encargado de meter en vereda a la rebelde y complicada clase del Curso del 63. Se trata de la apuesta de Antena 3 en el 2009, un docu-reality en el que un grupo de 20 jóvenes viajaban al 1963 para vivir en las mismas condiciones que por aquel entonces había. Lo que no imaginaban era que en el San Severo, se encontrarían con unos estrictos profesores que les obligarían a comportarse, vestirse y peinarse tal y como lo hacían los jóvenes en los 60.

Miguel Lago o Don Luís para los alumnos, era el encargado de impartir las clases de Biología y Fisica y Química. Y no solo eso, sino que también encarnó el papel de prefecto masculino del centro. Así pues se vio ante la compleja tarea de educar y enseñar las normas de comportamiento del internado a un grupo de jóvenes rebeldes. Y es que, si ha llegado a tener problemas con un miembro de la Familia Real, ¿Cómo no iban a saltar chispas con sus alumnos? El cómico protagonizó varios enfrentamientos con los chicos. 

Un papel que desempeño con gran maestría, puesto que muchas veces se te olvidaba que no era un profesor de la época cuando le veías regañar e incluso castigar a los estudiantes. Aunque no todos se toman bien o entienden su humor…

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