La preocupación por Mila Ximénez y su cáncer no ha desaparecido del plató de Sálvame. La colaboradora apareció tras un mes en silencio, pero tan solo le bastaron dos días para alarmar de nuevo a la opinión pública. No tiene fuerzas, está cansada y el tiempo se agota. Dos semanas han pasado del mensaje poco esperanzador que dio en pleno directo. Hoy, te contamos todos los detalles de una de las colaboradoras más importantes del mundo rosa.
Se ha rendido
> Desde que Mila Ximénez saliera de Gran Hermano VIP, su vida ha notado un gran cambio, y no para bien como así ella imaginaba. En la casa de Guadalix de la Sierra superó todos sus miedos. Con la ayuda de su presentador y amigo, Jorge Javier, consiguió enfrentarse a todas las fobias que, poco a poco, le hacían la vida imposible en su rutina diaria. Tras salir como tercera finalista, se reunió con su hija, Alba Santana, y sus nietos, a quienes quiere con locura. Son su motor, pero parece que en los tiempos que corren, ni si quiera eso le da fuerzas.
Y es que, fueron tan solo unos meses después cuando la tertuliana se vio en la obligación de anunciar que le habían diagnosticado cáncer de pulmón. Una nueva tragedia se unía a la familia de la colaboradora, acostumbrada a esta dura palabra por la lucha continuada de sus hermanos, también enfermos. Son más de seis meses los que Mila lleva luchando contra viento y marea. Aunque en un principio dudó de su valentía y su fuerza para enfrentarse al cáncer, con el apoyo de sus compañeros de programa empezó el tratamiento. Pero, unos meses más tarde, la película ha cambiado y la periodista parece haberse rendido.
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