«Morosos, deben la comunidad»: así es la vida de Rocío Carrasco y Fidel Albiac. Pero hay más detalles que te vamos a revelar. Rocío Carrasco sabe perfectamente que con esta docuserie sobre el infierno que ha vivido puede pasarle una mala factura. Pero necesitaba hacerlo. Así ha querido contar desde su perspectiva cómo lo ha vivido. Para ella es la única verdad, ya que hay documentos acreditativos tanto periciales, judiciales como médicos que lo atestiguan, pero su hija sigue al lado de su padre. Mientras Rocío, lo hace al lado de su mayor apoyo, su marido Fidel Albiac. Hace años que no sale y que vive enclaustrada en casa con unos comportamientos nada normales por parte de ambos. ¿Está viviendo Rocío Carrasco una segunda parte de su documental? Ya hay algunas personas que lo piensan y que creen que debería hablar de ello. Te descubrimos cómo vive tal y como nos ha revelado una fuente que vive en Valdelagua.
3«Vive recluida, parece que está como ida»
> Pero aun hay más datos de los vecinos que no del mítico Montenpinar de La que se avecina sino de Valdelagua. «Sale muy poco. Casi nada. Vive recluida en su casa», comentan los vecinos.
«No conduce. La traen y la llevan en esos coches antiguos. Tenían un chófer que era un dos por dos de estatura, que hacía de seguridad, de chófer, de jardinero, hacía de todo… ¡Muy raro! Tenía cara de pocos amigos y parecía de estos que han estado en cuerpos paramilitares», explican.
Aunque los amigos de Rocío Carrasco defienden mucho a Fidel Albiac y defienden que lo suyo es amor, otras personas que les ven, sin conocerles, no les gustan para nada lo que ven: «Cuando iban a comprar juntos, él (Fidel) no le hablaba bien. No le trataba bien. Ella parecía que estaba como ida», algo que no es de extrañar porque los medicamentos son muy fuertes.
No es el único testimonio. ¿Quieres ver más y ver qué te cuadra?
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