Hace unas semanas, Michu la liaba al protagonizar una exclusiva hablando mal de la familia que hoy en día le sigue ayudando económicamente. Arrepentida, se vio en la obligación de acudir al plató de Viva la vida para disculparse cara a cara con Ana María Aldón. A la espera de que de una vez por todas José Fernando salga del centro psiquiátrico, Michu sigue acaparando los focos por los vídeos e imágenes que sube a sus redes sociales. Te lo mostramos todo, a continuación.
4El vídeo de la hija de José Fernando que enternece
> Michu no aprende. Aunque sus declaraciones poco tienen que hacer ya en la actualidad rosa, son ahora las redes sociales las confidentes de su contenido más íntimo. Hasta que José Fernando salga de su ingreso en el Centro San Juan de Dios de Ciempozuelos, no tiene intención de volver a ponerse delante de una cámara de televisión, aunque a la joven le ha bastado publicar un vídeo para protagonizar, aunque fueran, durante unas horas, la atención de todos los seguidores. Pero, ¿que se emite en estas imágenes?
Ni más ni menos que María del Rocío, la hija en común que tiene con José Fernando. La pequeña parece que está encantada de ir al colegio, de jugar en la calle, de disfrazarse… por lo que su madre, orgullosa, no ha dudado ni un segundo en mostrarlo en sus redes sociales. Pero no ha sido la única vez que hemos sido testigos de los momentos más íntimos de la familia.
Hace unos días, Michu publicaba una fotografía en la sección de historias de su cuenta de Instagram en la que aparece junto a su hija María del Rocío mientras se comunican con José Fernando. Aunque la joven ha querido proteger la intimidad de su pareja colocando un enorme corazón en su cara, lo cierto es que se trata de la primera imagen del primogénito de Ortega que llega desde el psiquiátrico. La cuñada de Gloria Camila ha acompañado la bonita estampa con una romántica canción y un rosetón que dice: ‘El padre número 1’, además de un mensaje que manifiesta las ganas que tiene de reencontrarse con su novio: “Con verte me conformo, imagínate cuando te pueda tocar.
