Pablo Motos es una de las presencias más influyentes de televisión. Su programa, El hormiguero, lleva emitiéndose trece años. De esta forma, ha tenido la oportunidad de conocer a grandes estrellas. Con muchas mantiene una relación personal como Will Smith o Antonio Banderas. Además de estar muy bien relacionado, el presentador obtiene unos ingresos millonarios. Durante dos años consecutivos, 2018 y 2019, se ha ganado el puesto de ser la persona mejor pagada de la historia de la televisión. Genera unos ingresos anuales de más de 30 millones de euros. Poco quedó de aquel limpiacristales humilde que trabajaba duramente en el mismo hospital donde limpiaba su padre. Con mucho esfuerzo y buena suerte, Pablo Motos ha logrado superar dos ruinas y tener un patrimonio envidiable. ¿Quieres conocer cómo se ha hecho millonario y en que ha invertido su fortuna?
2El hormiguero: Su fórmula secreta para triunfar
> El primer contacto de Pablo Motos con el mundo de la comunicación se produjo de forma casual. Durante su adolescencia no llevaba una vida muy recomendable. Así que decidió refugiarse en la música para reconducir su camino. Desde ese momento, el presentador se convirtió en guitarrista. Acudió a un medio local para promocionar su nuevo proyecto y, tal y como el declara: “me enamoré de la radio”. Desde ese momento empezó su trayectoria como comunicador. Tuvo su primer éxito en 2006, cuando cuatro le contrató para conducir El hormiguero. Por aquel entonces le pagaban 75.000 por programa. Pero parecía serle insuficiente, así que decidido montar su propia productora y comprar el formato.
En 2011 Pablo Motos rompió el contrato con Mediaset porque no llegaron a un acuerdo económico. El presentador pedía 90.000 euros por programa. Cifra que fue rechazada por Paolo Vasile. En ese momento Atresmedia le hizo una propuesta que duplicaba la petición inicial de Motos. Así que, aprovechó que era el dueño del programa y se pasó a la competencia. Allí comenzó un entramado televisivo que demuestra su inteligencia. El hormiguero da trabajo a un centenar de personas, pero, los altos puestos, y consecuentemente, altos suelos, están ocupados por gente de su familia. Su mujer, Laura Llopis, es la guionista del programa. Por su parte, una de sus hijas es la jefa de escenografía y la otra colabora en la elaboración de guiones. Incluso, durante una temporada, su madre tenía una sección fija en el programa.
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