Era la noche del retorno. El Teatro Real de Madrid se enfrentaba a una jornada de apertura de la temporada con la recreación de Fausto, la obra magnánima de Goethe, bajo el inconfundible sello de La Fura dels Baus. Era también la primera aparición conjunta de los Reyes tras el 46 cumpleaños de la reina Letizia.
Una noche cargada de simbología que se truncó en polémica cuando, tras tres horas de intenso trabajo, los integrantes del elenco protagonista irrumpieron en el escenario del Real vistiendo lazos amarillos, en clara alusión al independentismo catalán. Los allí presentes no entendieron la evidente afrenta al Estado. El Teatro se rompió en un abucheo sin precedentes, tal y como ha podido comprobar Cotilleo.es.
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Así se han comportado los independentistas de La Fura dels Baus contra el Rey Felipe
Al grito de “viva el Rey”, los congregados quisieron mostrar su total desacuerdo ante el desafortunado gesto y apoyar, sin fisuras, a la Institución. La Fura dels Baus abandonó el lugar sin antes demostrar la seguridad en la reivindicación mostrada. Una noche que pretendía ser un referente cultural y que, desgraciadamente, acabó convirtiéndose en una muestra más de que la política ha corrompido, incluso, la cultura de nuestro país.
Elegante y muy segura
En una noche tan convulsa gustó el mono escogido por Letizia Ortiz. De manga asimétrica con capa, el vestido azul noche, dejaba al descubierto uno de los torneados hombros de la consorte. Letizia se decantó por unos impresionantes pendientes de Bvlgari, que ya lució en ocasiones anteriores. Felipe Varela fue el escogido para la cartera de mano que portaba en su mano izquierda y Nina Ricci para vestir sus pies con unos estilosos salones.
