Show must go on. Desde luego esa es una máxima que Jorge Javier Vázquez lleva grabada a fuego en su vida. Nadie se lo había notado jamás. Al menos, cuando las cámaras lo estaban enfocando.
El presentador estrella de Telecinco confesó hace unos días en su programa que había atravesado un proceso complicado en su vida donde «todo giraba en torno a su final«. La idea de morir era un lastre que no le dejaba avanzar.
La idea del suicidio
Ciertos episodios depresivos (aunque sean meramente temporales) invitan a ciertas personas a tomar decisiones radicales. No es el caso de Jorge, quien ha afirmado que «nunca he fantaseado con la idea del suicidio» y continúa «lo que sí me producía tristeza era pensar que lo que me quedaba de vida iba a vivirlo con ese desasosiego y con esa falta de ilusión».
Admite que no se puede quejar, es un afortunado y lo sabe positivamente. Precisamente su privilegiada posición le producía, comenta, la frustración de no poder compartir sus sentimientos más íntimos con nadie: «Muchas veces me he sentido incomprendido. No podía compartir mi tristeza con nadie. Cuando alguna vez lo hice, enseguida me decía: ‘Pero tú, ¿de qué te puedes quejar? Si te va muy bien en el trabajo, si lo tienes todo en la vida, te va bien económicamente, tienes pareja…’ […] Pueden pensar que soy un caprichoso o un egoísta«.
