ctus del que todavía no está repuesta. Como en el caso de Alberto Contador, que padeció el mismo problema, su caso ha servido para dar visibilidad a esta enfermedad. Un Ictus es un accidente cerebrovascular mucho más frecuente de lo que la gente se cree. Y aunque María Teresa se salvó casi de milagro, gracias en parte a la intervención de su conductor, le han quedado algunas secuelas. La matriarca de las Campos, como tantas otras personas que han sufrido un ictus, ha visto como alguna de las áreas de su cerebro se han visto afectadas. A veces los daños son irreparables. Algunas células nerviosas por la falta de riego, mueren. De ahí las consecuencias. La situación no es tan buena como desearía la presentadora. Y por ello María Teresa Campos ha vuelto al hospital.
Su chofer, el hombre que le salvó la vida, de nuevo a su lado en los malos momentos, como entonces
Fue en mayo del 2017. Gustavo, su chofer, hablaba con su jefa y se dio cuenta de que algo le estaba pasando. La interrogó y se dio cuenta de que presentaba todos los síntomas de una isquemia cerebral. Tenía trastornos al hablar, los músculos rígidos y la visión borrosa. Sospechó que un trombo estaba obstruyendo la circulación de la sangre a su cerebro. Le sirvió recordar que su jefa había protagonizado una campaña en la que se alertaba sobre la enfermedad. Reaccionó con rapidez: tomó las riendas de la situación y llevó a María Teresa de inmediato a una clínica. Sus sospechas eran acertadas. De allí fue trasladada en ambulancia a la Fundación Jiménez Díaz, donde fue ingresada en la zona privada de este hospital madrileño. Gracias a la decidida actitud de Gustavo y a la rapidez con que actuó, la presentadora no sufrió ningún tipo de parálisis.
Las secuelas de la enfermedad: los acúfenos
María Teresa de vez en cuando se ve aquejada de fuertes pitidos en los oídos que le molestan, una clara consecuencia del ictus que padeció. Lo confesó ante las cámaras de Telecinco en el episodio del reality Las Campos. Fue cuando viajó con sus hijas a Santiago de Chile para conocer los orígenes de su novio. Mientras hablaba con su cuñada Peti reveló el secreto que la atormentaba. No todo había ido tan bien tras el ictus: “ya sabes que se me han quedado unos mareos, lo que pasa que yo vivo como si no se me hubieran quedado, pero tengo momentos. Y bien, bien, no. Se suman los ruidos de la cabeza, los acúfenos esos, que se me han quedado también”.
¿Dónde está Edmundo? ¿Por qué no ha ido con ella al Hospital?
De nuevo su ángel de la guarda, Gustavo, ha ido con ella al hospital La Salud, al que habría ido según informan agencias, para sesiones de rehabilitación y una revisión general. Edmundo suele aparecer siempre en momentos más gratos. Tampoco estuvo cuando la operación de Terelu. María Teresa le adora, pero es posible que sea una elección libre de ella lo de tenerlo más “a las maduras” que a “a las duras”, al contrario de lo que se suele decir. Sería una elección libre de María Teresa.
Forman una pareja unida: Bigote está en Madrid y si no ha ido con su pareja es que ella prefiere que no vaya. “Todo está bien” ha dicho Bigote a Cotilleo.es . Sabemos que existe tratamiento médico para los acúfenos cuando tienen una causa concreta, y, sobre todo, ayuda psicológica, como señala la profesional Susana González al Diario Vasco” Hay gente que lo pasa realmente mal. Va a médicos, intenta de todo, recurre a medicación para dormir y ves mucha desesperación. Su vida gira en torno al acúfeno, que procuran evitar. Por ejemplo, oyen un zumbido y ponen la música muy alta en casa, pero si estás evitándolo estás centrándote en ello. Y no hay que evitarlo, sino afrontarlo para poder habituarse a él”. Cuando no pueden ser curados hay terapias de reentrenamiento y habituación, así como de relajación. Hay medicamentos que pueden mitigar el sonido.
La mala salud de hierro de Las Campos
María Teresa Campos tiene una larga lista de enfermedades en su curriculum vital: un cáncer de garganta, la operación de vesícula, el ictus…Tiene, como vulgarmente se dice, una mala salud de hierro. Ella ha dicho alguna vez que es algo hipocondriaca, pero lo cierto es que se repone en un tiempo récord de casi todos los males que la aquejan. Tiene una naturaleza muy fuerte. El pasado mes de junio cumplió 77 años. Su hija Terelu tampoco se ha librado de algunos sustos graves.
La hija mayor de la veterana presentadora supo a mediados de este año que volvía a padecer cáncer de mama. Tuvo que pasar el pasado 11 de julio por el quirófano para que le extirparan el tumor. Tras reflexionar durante varios meses, ante el peligro de una nueva recaída, decidió adoptar una dura decisión. E- T el pasado 11 de julio. La matriarca del clan Campos estuvo en todo momento al lado de Terelu, al igual que lo hizo hace seis años. A ello se suma la última intervención a la que tuvo que someterse Terelu este pasado 14 de noviembre, debido a problemas de cicatrización tras la doble mastectomía.
Todo son problemas para María Teresa
María Teresa Campos acaba de tomar la decisión de mudarse de casa a otra más pequeña. La enorme mansión donde vivía le obligaba a hacer frente a muchos gastos. Otro problema adicional es la ausencia de un proyecto claro televisivo, aunque María Teresa sigue teniendo contrato vigente con Telecinco. Sus fans consideran que aún tiene mucho que ofrecer, y ella es de la misma opinión. Nadie ha sido capaz de retransmitir con tanta fuerza y oficio un acontecimiento tan sorpresivo e importante para la historia como la caída de las Torres Gemelas. Le pilló en plena tertulia del corazón. Tenemos María Teresa Campos para rato, esperemos que se recupere lo antes posible de sus problemas.