Sobre algunos de los tertulianos del magacín vespertino de Telecinco siempre han circulado rumores acerca de sus hábitos poco saludables. Uno de los colaboradores se abrió en canal y confesó sin tapujos lo que muchos ya se imaginaban: sufrió un “brutal” problema de adicción a las drogas. ¿Quieres saber de quién se trata y cómo pudo salir de aquel infierno? Sigue leyendo, te lo contamos todo a continuación.
“Carreras de drogas en los baños”
> Los rumores sobre lo que hacen o dejan de hacer los colaboradores de Sálvame no son nada nuevo. Algunos siempre han sido señalados por sus presuntos hábitos poco saludables, pero no fue hasta que una antigua tertuliana rompió su silencio cuando este asunto se puso sobre la mesa. Karmele Marchante, muy enfada por el trato que recibió de parte de sus otrora compañeros, amenazó en su cuenta de Twitter con revelar “todo” lo que vivió durante sus años de trabajo en el magacín vespertino de Telecinco: “carreras de drogas en baños y camerinos, alcohol, mentiras no informativas, órdenes de la dirección para desvirtuar aconteceres para mayor audiencia…”.
¿Son ciertas las palabras de Karmele Marchante o solo habla desde el resentimiento? Lo cierto es que uno de los colaboradores de Sálvame, entre otros tantos, ha confesado que pasó por una espiral de autodestrucción en la que las drogas formaban parte de su día a día. Incluso reconoció que llegó a temer por su vida… ¿Quieres saber de quién se trata y cómo logró salir de aquel terrible bache? Sigue leyendo, te lo contamos todo en la página siguiente.
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“La cocaína me atrapó”
> Se trata de Alonso Caparrós, que hace ya algunos años protagonizó una de las entrevistas más emotivas y emocionantes que se recuerdan en Sábado Deluxe. “Consumía lo suficiente como para matar a siete caballos”, reconoció entonces. No fue hasta el mayo pasado cuando el colaborador de Sálvame retomó esta cuestión en su cuenta de Instagram y reveló el infierno que había pasado por culpa de los estupefacientes. “En mi caso fue brutal. Ya sea por genética o por las circunstancias, el enamoramiento fue muy brutal, muy atroz, soñaba con montañas de cocaína y me atrapó de una manera bestial y esa sensación sigue latente. Fue una invasión”, lamentaba el tertuliano.
Lo cierto es que las confesiones de Alonso Caparrós no dejaron indiferente a nadie, ni siquiera a sus compañeros de Sálvame, aunque ya conocían esta parte de su pasado… Por lo visto, el colaborador consumía en grandes cantidades y, reflexionando, se preguntaba cómo es posible que siga vivo. ¿Quieres conocer más detalles? Sigue leyendo, te lo contamos todo en la página siguiente.
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“¿Por qué no me he muerto?”
> “Yo fui consciente de mi problema desde el principio y, desde ese momento, estuve con muchos tratamientos y no pude con ellos. No sé por qué fue… ¿Por qué no me he muerto? Con lo que he consumido… Eso me ha hecho cambiar mi forma de pensar”, explicó Alonso Caparrós a través de su cuenta de Instagram. Se trata de declaraciones muy complicadas, aunque no son las más duras que han salido de boca del colaborador de Sálvame. El que fuera presentador de Furor recordó incluso que tenían que atarle a la silla del programa para que no se le notaran los temblores propios que aparecen tras una ingesta masiva de estupefacientes.
Por fortuna, Alonso Caparrós logró salir de aquel infierno, aunque asegura que todavía tiene que mantenerse alerta para no recaer. El apoyo de sus seres queridos y su familia fue fundamental, aunque también los tratamientos a los que se sometió para superar sus adicciones. Algunos eran tan duros que le provocaban drásticos efectos secundarios y secuelas. ¿Quieres conocer más detalles? Sigue leyendo, te lo contamos todo en la página siguiente.
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“Aparecía babeando”
> Según reveló el propio Alonso Caparrós, estuvo ingresado hasta en dos ocasiones en una clínica de desintoxicación, donde se sometía a terapia y tratamiento para apartar las drogas de su vida. Las técnicas que allí se empleaban no eran precisamente suaves, llegando incluso a utilizarse los electroshocks. El colaborador de Sálvame recuerda lo duro que fue atravesar por todo eso, y explica las secuelas que le quedaban tras las sesiones. “Estuve dos veces ingresado y los tratamientos me dejaban con fuertes dolores, tanto que al acabarlos aparecía babeando”, lamentó el tertuliano.
Alonso Caparrós también recalca lo importante que fue recibir el apoyo de su familia. De hecho, fueron sus seres queridos una de las razones principales que lo llevaron a buscar tratamiento. Les he hecho mucho daño. Espero que estén orgullosos. Lo hago también para que la familia de mi esposa sepa también con quién se ha casado. Es una historia que siempre tengo que tener en la cabeza. Voy a estar siempre en peligro”, señaló visiblemente afectado.