Rafael Francisco Payá Pinilla, mejor conocido como Rappel es un modista, empresario y fue un personaje recurrente de la televisión española, quien se autodefine como vidente. Se caracterizaba por su estética extravagante, siempre vestido con túnicas de colores brillantes y el pelo recogido con una coleta o trenza.
Estudiante de un colegio jesuita y del Liceo Francés de su ciudad natal, obtuvo el título de profesor de francés en La Sorbona de París.
Además de vidente, Rappel es conocido como modista

Rappel estudió diseño y patronaje para abrir un taller de ropa a medida, de alta calidad, encima de la tienda que sus padres tenían en la calle Ayala de Madrid, dedicándose al diseño de moda durante veinte años.
Entre sus clientes se encontraba la actriz Niní Montián, con quien entabló amistad. Ello, unido a la fama de vidente que empezaba a adquirir, le permitió acceder a la alta sociedad de la época franquista.
Entre otras cosas, es conocido por confeccionar durante años los vestidos de María de las Mercedes de Borbón, al mismo tiempo que le preguntaban por su futuro Tita Cervera, Dolores Ibárruri, Severo Ochoa, e incluso Francisco Franco y Carmen Polo, entre otros. Se dedicó al diseño de moda durante veinte años.
En la década de los setenta, Rappel fue alcanzando fama como vidente

Durante diez años fue director de relaciones públicas de la sala de fiestas Florida Park de Madrid. A partir de los años setenta, sus contactos le permitieron obtener contratos con varias revistas para escribir los horóscopos, conseguir sus propios programas de radio y aparecer en numerosos programas de televisión.
Entre ellos, destaca los cinco años que estuvo en el programa Tómbola, donde predecía el futuro de los personajes de la prensa rosa, y sus colaboraciones en los programas matinales de María Teresa Campos. Como invitado, ha participado en el programa de entrevistas de Telecinco Mi casa es la tuya.
Desde temprana edad, Rappel se hizo famoso pues le leía las cartas a las distinguidas clientas que frecuentaban su negocio. Por el salón-recibidor de su taller desfiló en aquellos años lo más granado de Madrid y alrededores.
Una de las clientas habituales, la actriz Niní Montián, quien era amiga personal de Alfonso XIII y Franco, comenzó a llevar a Carmen Polo, amante del lujo, del diseño y buscadora de telas exclusivas traídas de París. Hasta que, en una ocasión, la conocida como marquesa de Ampudia le comentó a Rappel que Paco —así llamaba ella a Franco— quería que le echara las cartas, en donde se comenta que le ‘leyó el futuro’ al dictador.
Rappel también se apuntó a la moda de los realities

Además, ha concursado en dos reality shows: La Granja 2 (2005) y Gran Hermano VIP 4 (2016), donde quedó tercer finalista de la edición.
La popularidad de Rappel resurgió gracias a su participación en los realities donde, entre otras cosas, confesó a sus compañeros que nunca se había pasado un mes sin tener sexo y que llevaba 30 años con una pareja.
Poco después, debutó como actor de teatro, interpretándose a sí mismo en la comedia El secuestro del adivino (2017), u otra para ejercer de anfitrión en la versión gourmet del concurso Ven a cenar conmigo, donde sus invitados degustaron su receta de pollo a la provenzal y su legión de fans pudo recrearse la vista en su casoplón en el Barrio de Salamanca.
Recientemente Rappel apareció en el programa ‘Toc, toc, ¿se puede?’

Recientemente, Rappel, abrió las puertas de su casa para las cámaras de ‘Toc, toc, ¿se puede?’, programa que se adentra por primera vez en las casas más curiosas, bonitas, históricas o extravagantes de Madrid para disfrute y cotilleo de todos los espectadores de la cadena. Vanguardia y diversión se dan la mano en este espacio que estrena Telemadrid.
El conocido vidente presentó ante las cámaras un recorrido exclusivo por su nueva casa ubicada en la calle Princesa, en el corazón de Moncloa, con vistas privilegiadas sobre el Palacio de Liria, y repleta de sus objetos más íntimos.
En la casa de Rappel predomina la decoración barroca

Una casa extremadamente barroca en su decoración y en la que Rappel vive desde hace cinco años. “Yo soy urbano –asegura-. Me gusta el centro. La verdad es que vivir bien no es muy barato”.
La decoración de la casa de Rappel, está repleta de objetos de arte, entre los que destacan dos ‘torcheros’ venecianos, varias imágenes religiosas, fotos suyas con personajes como Lola Flores, Rocío Jurado o María Dolores Pradera, abanicos históricos –entre ellos, uno de marfil regalado por Cayetana de Alba- o una figurita del niño Jesús que le dio el cantante Juan Gabriel para que Rappel lo tuviera al artista entre sus oraciones.
“Yo he sido toda la vida muy barroco”, confiesa, mientras muestra su dormitorio, en el que domina el morado –“un color que significa seguridad, poder y riqueza”-, el armario en el que guarda parte de sus inconfundibles túnicas, el baño con obras de arte orientales o la cocina, donde junto a la nevera, tiene una máquina de una máquina de discos Würlitzer. Todo cabe en este piso decorado hasta el último centímetro.
La comparación entre Rappel y Walter Mercado

Durante un tiempo, existió la comparación entre Rappel y Walter Mercado, sobre todo existía la interrogante de quién había copiado a quién. En reciente entrevista, Rappel aclaraba:
«Puede parecer que yo copié la imagen de este señor», contaba Rappel, «pero eso yo ya lo había hecho antes. Desde el año 62 tenía mi taller de moda y mi tienda, donde también leía las manos y echaba las cartas; entre las señoras de la alta sociedad se corría la voz: uy, Rappel, no veas lo que adivina».
Por aquellos años, ya se hacía túnicas para asistir a galas y empezaba a experimentar con la imagen que le ha hecho popular. Pocos años después, empezó a aparecer en TVE, «cuando aún era en blanco y negro y estaba en Paseo de La Habana», antes de 1964.