La Duquesa de Sussex, Meghan Markle, ha retomado su agenda después de que acudiera con su esposo, el Príncipe Harry, al Jubileo de Platino de Isabel II, un acontecimiento icónico en la historia de Reino Unido, en el que los enamorados quisieron mantenerse al margen porque sabían que, de hacerlo de otra manera, la monarca británica perdería protagonismo.
Esta mañana, semanas después de que el Príncipe Carlos, los Duques de Cambridge y la misma reina conocieran a la pequeña Lilibet y volvieran a ver a un no tan pequeño Archie tras dos años de distanciamiento, empezamos a leer las primeras informaciones que rodearon a uno de los momentos más íntimos y humanos que puede vivir cualquier familia. Lo hemo hecho a través de unas declaraciones que ha dado la exactriz de Suits, en las que se ha pronunciado sobre sus dos embarazos y sobre el bebé que perdió.
Ha sido una reivindicación
>La empresaria, que se encuentra ahora mismo en Estados Unidos, se ha pronunciado sobre los derechos reproductivos y sobre las consecuencias del Tribunal Supremo americano que ha tumbado el blindaje a nivel federal del derecho a la interrupción voluntaria del embarazo, y deja la legislación al respecto en manos de los Estados. «Tal vez el objetivo sean las mujeres, pero las consecuencias impactan en todos nosotros. Mi marido y yo lo hablamos mucho los últimos días. Él es feminista también«, ha destacado Meghan Markle en Vogue.
«Lo que pasa con nuestros cuerpos es profundamente personal, lo que puede llevar también al silencio y al estigma, incluso cuando tantos de nosotros tenemos que lidiar con crisis de salud. Sé lo que es sufrir un aborto, lo he hablado públicamente«, ha señalado en esta misma entrevista y añade, «pienso en lo afortunada que he sido por haber podido tener a mis dos niños«.
