Chanel sigue viviendo casi en una burbuja. La cantante de origen cubano afincada en nuestro país desde muy chiquitita, ha logrado una gesta en Eurovisión que no se lo esperaba nadie. Las casas apuestas nos pronosticaban que íbamos a estar en el ‘top 5’, pero lo que no nos esperábamos es que al final, nos llevaríamos la medalla de bronce en una votación de lo más ajustada. Un tercer puesto que sabe a victoria y por eso, Chanel ha sido recibida casi con honores en España.
Chanel lo da todo, una última vez en Madrid: «Esto está siendo un sueño y que lo estamos viviendo juntos»
> Un apoyo que se trasladaba a las calles de Madrid. «Esto está siendo un sueño y que lo estamos viviendo juntos», aclaraba a su llegada a nuestro país. Sueño que no acababa. Para celebrar el tercer puesto que sabía a victoria, la joven se tenía que preparar para recibir todo un baño de masas en la Plaza Mayor de la capital. Allí, aprovechando el escenario montado con motivo de las Fiestas de San Isidro, Chanel lo daba todo.
En menos de 24 horas, la joven se volvía a subir a un escenario. Llevando gafas de sol porque seguro que su cara reflejaría un cansancio, la cantante no podía no darlo todo ante una plaza abarrotadísima de gente. Miles de personas esperaban que la cantante volviese a dar un show como el que ya hizo en Turín para deleite de todos.
Muy emocionada ante las impresionantes muestras de cariño de los madrileños, en el momento que se subía a las tablas, adiós cansancio y adiós a todo. La profesionalidad una vez más se adueñaba de ella y de todo su equipo para dar un golpe sobre la mesa y demostrar que esa medalla de bronce sabe a oro.
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