José Luis Losa, ganador de ‘Supervivientes 2017’ y fuera finalista de ‘MasterChef 4’, ha muerto a los 47 años de edad. El concursante ha sido hallado muerto en su casa del pueblo de Munera, dos meses después de fallecer su esposa, Inma Simarro de 48 años.
Su mujer moría víctima de un infarto a raíz de su diabetes, según relató él mismo, destrozado en Sálvame ante Jorge Javier Vázquez y Adela. Ironías de la vida, el que ganara una edición de supervivencia pasando todo tipo de calamidades e inclemencias, ha sido incapaz de superar la pérdida de su esposa. ¡Tremendo amor la tenía! Recordemos que se negó a abandonar el concurso pese a sufrir problemas de salud.
José Luis deja una hija y a un hijo, aunque queda la autopsia forense para confirmar de qué ha muerto el gran concursante.
Su vida no ha sido nada fácil
Junto a la fotografía de su mujer, el pasado 16 de marzo escribía: «Cuanto te he querido, y te querré. Qué injusto. Te quiero y siempre te querré». Para José Luis era inconcebible entender por qué había muerto su esposa. «Es injusto«, comentaba aunque agradecía la labor de los médicos que la atendieron en Albacete.
Aun así, su vida no ha sido fácil, como él mismo confesaba y como te vamos a contar. Su infancia fue también muy cruel y su paso por los concursos agridulce. Aunque el ganador del año 2017, no solo consiguió meterse a los espectadores en el bolsillo, sino también proclamarse – frente a Alba Carrillo – como el ganador de la edición, poco después acabaría sintiéndose “despreciado y maltratado”.
José Luis, pintor industrial demostró que la popularidad no es un factor determinante en ‘Supervivientes’; en su paso por el reality, hizo valer su peculiar personalidad su aspiración por superarse a sí mismo.
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